Dublín, 23 oct (EFE).- El alto comisionado del Gobierno para la Marca España, Carlos Espinosa de los Monteros, aseguró hoy que esta campaña encaminada a mejorar la imagen del país en el extranjero no es "rancia" y que cada día más empresas exportadoras reconocen los beneficios que les reportan situarse bajo su "sombrilla".
Al término de una vista de dos días a Irlanda, el comisionado, cuyo puesto tiene rango de secretario de Estado, celebró que se esté recuperando el prestigio de un país que está saliendo, dijo, de una de las crisis económicas más graves de su historia.
Un ejemplo de una de esas empresas que triunfan fuera de las fronteras españolas es la multinacional catalana Grifols (MC:GRLS), que este miércoles abrió en Dublín su nuevo centro mundial de operaciones de la división Bioscience, en un acto al que asistieron, entre otros, los ministros irlandeses de Trabajo y Justicia.
"Nunca se es demasiado patriota", señaló en una entrevista con Efe el comisionado para defender la Marca España y el sentimiento de "españolidad", que, matizó, "en nuestro país es un poco excepcional".
"Ocurre en todo el mundo en países muy desarrollados, como puede ser EE.UU., donde ese orgullo de pertenencia alcanza cotas muy altas. También en países de desarrollo intermedio o en vías de desarrollo. Lo normal es que los nacionales se sientan identificados con su país", apostilló.
En su opinión, en España existe "cierta resistencia" a reconocer "lo que hacemos". "Somos hipercríticos, existe cierto deseo de autoflagelarse en ocasiones, a veces tendemos a pensar que lo de fuera es mejor que lo nuestro", arguyó.
A su parecer, esas actitudes negativas están más extendidas entre "la gente que ha tenido menos contacto con el exterior", frente a la que ha salido más y "compara su país con otros", lo que les conduce a "fortalecer ese sentimiento patriótico o de amor a la patria".
Espinosa de los Monteros tampoco cree que la Marca España sea una iniciativa que merezca que desde algunos sectores se la haya tachado de rancia o anticuada.
"Sería muy triste porque llevamos solo tres años de vida y con tres años de vida es un muy difícil ser rancio", recalcó el secretario de Estado, quien aludió a encuestas efectuadas "por organismo independientes" que dan una visión positiva de la labor de la Marca España.
El comisionado señaló que los estudios demuestran que el reconocimiento de la Marca España ha ido aumentando desde "niveles inferiores al 50 por ciento de aceptación" en 2013 a "un nivel superior ahora al 70 por ciento global".
En todas las comunidades autónomas, agregó, ese nivel de aprobación supera en estos momento el 50 por ciento, incluso en aquellas en las que, "de alguna manera, se intenta evitar y, en algunos casos atacar, el concepto de España".
Las citadas encuestas también revelan que la opinión de las empresas exportadoras sobre la utilidad de la Marca España "ha evolucionado muy favorablemente".
En este sentido, un estudio de la escuela de negocios y márketing española ESIC, realizado con una muestra de 2.800 empresas exportadoras, ha preguntado a sus responsables "si la Marca España le ayuda a vender más".
"Con algunas oscilaciones entre algunas comunidades autónomas, dos tercios del total de esas empresas exportadoras, sacadas del censo oficial de exportadores, dicen que sí", apuntó.
Según Espinosa de los Monteros, estas empresas constatan que es beneficioso situarse "bajo la sombrilla de la Marca España", al mismo tiempo que "ser percibido como español" les facilita el trabajo en el mercado en el que operan.