SANTANDER (Reuters) - El presidente de Mapfre (MC:MAP) dijo el miércoles que la aseguradora aún no ha tomado una decisión sobre si demandará o no a su antiguo socio Bankia (MC:BKIA) por la fallida inversión con motivo de la salida a bolsa de la entidad de crédito, considerada irregular por el Supremo.
"Hemos analizando y seguimos analizando y la decisión la tomará el consejo cuando corresponda", dijo Huertas para añadir que la ventana para demandar todavía estaba abierta.
La aseguradora, que invirtió 280 millones de euros en la salida a bolsa, no se ha pronunciado de manera tajante sobre la posibilidad de emprender acciones legales, a pesar de las insistentes preguntas de los medios en los últimos meses.
Pero la presión sobre los institucionales que invirtieron en la entidad antes de que se destapase un enorme agujero financiero que llevó a su nacionalización y al rescate bancario europeo, se disparó después de que a finales de mayo Iberdrola (MC:IBE) se sumase a miles de particulares y pidiese compensaciones por su inversión en Bankia.
Aunque dijo que ha habido algunas sentencias que podían dejar la puerta abierta a la viabilidad de una hipotética demanda, el directivo reconoció que la sentencia del Supremo en la que distingue entre inversores institucionales y particulares merma las posibilidades de éxito.
"Hay enormes dificultades para conseguir la viabilidad a luz de la sentencia del Supremo", dijo, aunque recordó alguna sentencia de pequeños inversores institucionales a los que podría devolvérseles la inversión.
Un juzgado de primera instancia de Madrid dio la razón a la firma Festina Lotus y pidió a la matriz de Bankia devolver los dos millones de euros invertidos en la salida a bolsa.
No obstante, a diferencia de Festina, tanto Iberdrola como Mapfre no eran solo accionistas institucionales sino que tenían una estrecha relación, incluso accionarial con el banco. En el caso de Mapfre, además de una joint venture comercial las dos entidades tenían participaciones cruzadas y el presidente del banco, Rodrigo Rato, participaba en el consejo de la aseguradora.
Aunque el Tribunal Supremo abrió la puerta a las miles de demandas por la salida a bolsa de Bankia al considerar que el folleto informativo de la oferta contenía graves inexactitudes, distinguió expresamente entre inversores particulares e institucionales al entender que, a diferencia del gran inversor, el pequeño no tenía otros medios para acceder a información.
Bankia ha devuelto ya 1.200 millones de euros a 190.000 inversores minoristas como compensación por la salida a bolsa, en gran parte con acuerdos amistosos.
Según cálculos de la entidad, todavía siguen en trámite judicial unos 30.000 procedimientos, que requerirán un desembolso aproximado de 400 millones de euros. El grupo ha provisionado entre 2014 y 2015 1.840 millones de euros para hacer frente a las demandas, pero esta cantidad no incluye posibles compensaciones a los inversores institucionales que suscribieron acciones por unos 1.200 millones de euros.