Elmau (Alemania), 6 jun (EFE).- La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente francés, François Hollande, hablaron hoy de nuevo por teléfono con el primer ministro griego, Alexis Tsipras, en búsqueda de una solución a la crisis de Atenas horas antes de que arranque la cumbre del G7.
Fuentes de la Cancillería confirmaron a Efe la conversación a tres bandas, aunque no quisieron desvelar el contenido de la misma.
La marcha de la economía internacional centrará mañana la primera sesión de trabajo de los líderes de Estados Unidos, Alemania, Francia, Reino Unido, Italia, Japón y Canadá en el palacio bávaro de Elmau (sur de Alemania) y Merkel, anfitriona del encuentro, asume que Grecia no podrá estar ausente de los debates.
En una debate extraordinario ante el Parlamento heleno, Tsipras mostró ayer su determinación a continuar negociando con las instituciones, el Banco Central Europeo (BCE), la Comisión Europea (CE) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), pese a las diferencias que hasta ahora han impedido un acuerdo y pidió el apoyo de la oposición.
A su juicio, el acuerdo logrado con el FMI para retrasar y agrupar los pagos que había que debía saldar Atenas a lo largo de junio, un total de 1.580 millones de euros, para pagarlos a fin de mes demuestran que "nadie quiere la ruptura".
Hasta finales de junio está vigente la prórroga del segundo rescate acordada por el Eurogrupo, pero antes se debe alcanzar un acuerdo para que Atenas reciba el último tramo de la ayuda financiera, 7.200 millones de euros.
El mandatario griego confesó que la propuesta que le entregó hace unos días el presidente de la CE, Jean-Claude Juncker, en nombre de las tres instituciones fue una "sorpresa desagradable".
Esta propuesta había sido revisada en una reunión no anunciada en la Cancillería de Berlín -en la que estuvieron presentes entre otros Merkel y Hollande- y difiere aún en puntos esenciales de la que presentó el Gobierno heleno.