Río de Janeiro, 27 sep (EFE).- Brasil puso hoy en operación ocho
nuevas plantas termoeléctricas alimentadas con bagazo de caña de
azúcar, que tienen una capacidad conjunta para generar 543
megavatios de energía.
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, participó en
el acto de inauguración de la Central Termoelétrica (UTE) Barra
Bioenergía, ubicada en Barra Bonita, municipio del interior del
estado de Sao Paulo.
Las otras siete generadoras, construidas igualmente en Sao Paulo,
el estado más rico y poblado de Brasil, fueron inauguradas
simultáneamente.
"Estamos dando pasos extraordinarios para construir y mostrarle
al mundo opciones de producción de energía alternativa que puedan
librar al mundo de la emisión de los gases del efecto invernadero
que tantos problemas le causan a la Tierra", destacó Lula.
El jefe de Estado afirmó que, de los 28.409 megavatios de
potencia instalada que fueron agregados al parque energético
brasileño en sus ocho años de Gobierno, 4.000 son de térmicas que
utilizan la biomasa como combustible, un residuo "que antes
quemábamos o botábamos", según dijo.
"Las plantas térmicas de biomasa representan hoy el equivalente
al 6,6% de la matriz energética de todo el país. Actualmente tenemos
375 centrales operando con capacidad para generar 7.265 megavatios",
afirmó.
Las nuevas térmicas, cuya construcción requirió una inversión de
853,6 millones de reales (unos 496 millones de dólares), pertenecen
en su mayoría a empresas fabricantes de azúcar y de etanol de caña
de azúcar, según el Ministerio de Minas y Energía.
Las plantas aumentan el valor agregado del bagazo de la caña de
azúcar, que es considerado un residuo en Brasil, mayor productor
mundial de caña de azúcar, de azúcar refinado y de etanol derivado
de esa materia prima.
La térmica a la que acudió el jefe de Estado funciona en un local
anexo al ingenio de Barra, la segunda mayor planta procesadora de
caña de azúcar de Brasil, y pertenece a la empresa Cosan, el mayor
productor de azúcar y etanol del país.
Esta unidad tendrá una potencia instalada de 66 megavatios, pero
Cosan planea ampliar la planta para que pueda producir hasta 136
megavatios, suficiente, según la empresa, para atender la energía
demandada por las residencias de una ciudad de 1,2 millones de
habitantes.
La empresa ya tiene en operación otras seis plantas alimentadas
con bagazo de caña de azúcar que producen 569 megavatios.
Además de elogiar la "energía limpia" generada con residuos de la
caña, Lula destacó en su discurso que el etanol producido por Brasil
proviene de la caña de azúcar y no del maíz como Estados Unidos.
"Estados Unidos produce etanol con maíz, lo que encarece el
cereal y la ración para animales. El etanol estadounidense cuesta
tres veces más que el nuestro", afirmó Lula al pedir la reducción
del arancel que EE.UU. cobra sobre la importación del etanol
brasileño. EFE