Washington, 24 sep (EFE).- El presidente de la Reserva Federal (Fed) de Chicago, Charles Evans, señaló hoy que el banco central estadounidense debería ser "excepcionalmente paciente" para ajustar su expansiva política monetaria y apuntó a los riesgos de una "prematura" alza de tipos de interés, ahora entre el 0 % y el 0,25 %.
"Deberíamos ser excepcionalmente pacientes en el ajuste de la política monetaria, incluso hasta el punto de permitir una modesta alza de nuestra meta inflacionaria", indicó Evans en una conferencia en el Peterson Institution for International Economics en Washington.
La Fed cuenta con un doble mandato de fomento del pleno empleo y de estabilidad de precios.
"Antes de subir (los tipos), deberíamos contar con una gran cantidad de confianza de que no nos veremos forzados en dar marcha atrás", subrayó.
Evans, considerado una de los miembros más dispuestos al uso de la política monetaria para apoyar el mercado laboral, se mostraba así en desacuerdo con las crecientes peticiones de analistas y expertos de la necesidad de una subida de tipos en EE.UU., actualmente en niveles excepcionalmente bajos de desde 2008, antes de lo anticipado.
"No estoy muy cómodo con los llamados para elevar nuestra tasa de referencia antes que tarde", dijo el presidente de la Fed de Chicago.
De hecho, agregó, "creo que el principal riesgo que encaramos hoy es diseñar unas condiciones monetarias restrictivas de manera prematura".
Evans no vota este año en las reuniones del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, en inglés), el órgano que rige la política monetaria, pero sí lo hará en 2015.
Los analistas coinciden en que el próximo año será el momento de la primera subida de tipos en EE.UU. desde 2008, aunque discrepan acerca de la fecha.
En la reunión de la pasada semana, Janet Yellen, la presidenta de la Reserva Federal de EE.UU., insistió en que los tipos de interés permanecerán en el rango actual por "un tiempo considerable".
La recuperación económica en EE.UU., tras la gran recesión de 2008, está siendo inusualmente frágil y la tasa de desempleo cerró agosto en el 6,1 %, pero Yellen remarcó en la rueda de prensa que el mercado laboral aún muestra signos de "debilidad".
La próxima reunión de la Fed tendrá lugar a finales de octubre, cuando se espera que el banco central ponga fin al multimillonario programa de inyección de liquidez mediante la compra de bonos.