Por Huw Jones y David Milliken
LONDRES (Reuters) - Los reguladores británicos darán a conocer el miércoles unos planes que tienen como objetivo reformar el comportamiento de los mercados financieros, donde los bancos han sido multados con miles de millones de libras por tratar de manipular divisas y tipos de interés.
El Banco de Inglaterra, el Tesoro y la Autoridad de Conducta Financiera (FCA en inglés) publicarán las recomendaciones de un informe sobre mercados justos y eficaces para su aplicación en conductas y operaciones de mercados de divisas, bonos y materias primas.
"Va a decir algunas cosas muy importantes sobre cuál debería ser el alcance de la regulación para clases de activos que históricamente no han estado regulados en exceso", dijo a Reuters el consejero delegado de la FCA y co-presidente de este análisis, Martin Wheatley.
Este informe se centrará en cómo mejorar los estándares de comportamiento entre los operadores de los bancos, recomendará sanciones más duras y dará a los mercados una orientación más detallada sobre cuáles son las prácticas comerciales aceptables.
Responsables del sector financiero esperan que el informe tome en cuenta algunas de sus ideas, como la de actuar enérgicamente sobre los operadores considerados como "manzanas podridas", haciendo más difícil que un trader sin escrúpulos consiga un puesto indiscutido en otro banco.
Hay quienes esperan un nuevo organismo independiente que facilite las directrices sobre las prácticas de mercado y haga cumplir un nuevo código de conducta global en el que los bancos centrales ya están trabajando.
Wheatley dijo que, por ejemplo, era necesario fijar con mayor claridad cuándo una cobertura legítima en los mercados se vuelve un abusivo "front-running", práctica en la que los bancos emplean información para operar por cuenta propia antes que sus clientes.
También se esperan guías sobre cuándo es aceptable salirse de una operación en divisas en el último minuto, práctica que en este caso se conoce como "última mirada".
Dada la naturaleza global de los mercados de divisas, materias primas y bonos, Wheatley dijo que se necesitaría un respaldo internacional para que las recomendaciones del informe sean realmente eficaces en la práctica.
Un funcionario del sector dijo que los reguladores británicos podrían pedir requisitos de capital adicionales a aquellos bancos que no logren aplicar las recomendaciones.
Se espera que el gobernador del Banco de Inglaterra, Mark Carney, y el ministro de Finanzas británico, George Osborne -que encargaron el informe el año pasado- mencionen sus conclusiones en los discursos que darán el miércoles en la City londinense.
Los economistas también quieren comprobar si Carney hará comentarios sobre la fortaleza de la libra esterlina, que ha subido un 4 por ciento en el último año, y no esperan que repita la advertencia que hizo el año pasado sobre una subida de los tipos de interés antes de lo esperado.
"La impresión que hay en este momento es que el Banco está claramente en modo de espera".