Bruselas, 2 ago (.).- El banco holandés ING (AS:INGA) redujo su beneficio neto un 1,5 % en el primer semestre del año, hasta los 2.514 millones de euros, respecto a los 2.552 del mismo periodo del año anterior, según informó hoy la compañía.
Entre abril y junio, el beneficio neto aumentó un 0,9 % hasta los 1.371 millones de euros, frente a los 1.359 millones registrados en el mismo periodo de 2016, según informó hoy la compañía.
En el primer trimestre de 2017, la entidad bancaria logró un beneficio neto de 1.143 millones de euros, lo que suponía un incremento respecto al mismo periodo del año anterior.
El director ejecutivo del banco, Ralph Hammers, explicó a través de un comunicado que durante este trimestre la entidad ha hecho importantes inversiones en el marco operacional para su transformación digital, y destacó el incremento de la base de clientes del grupo hasta los 36,5 millones en los primeros seis meses del año.
Hammers mencionó en concreto el lanzamiento de la aplicación "Banking to go" en Alemania, que incluye nuevas facilidades para las operaciones bancarias a través del teléfono móvil con el objetivo de lanzar una plataforma digital única en el futuro.
Por otra parte, el resultado subyacente neto del grupo ascendió a 2.578 millones de euros en el primer semestre, un 14,1 % más respecto al mismo periodo de 2016; en el trimestre, este cayó hasta 1.403 millones de euros (-1 %).
El resultado subyacente antes de impuestos se situó en 3.644 millones de euros, un 14,1 % más que en el primer semestre de 2016, cuando alcanzó los 3.195 millones; en el trimestre, cayó a 1.992 millones (-0,8 %).
El banco registró además un ingreso subyacente de 8.928 millones de euros en el primer semestre, un 3,4 % más, y de 4.532 millones de euros entre abril y junio, un 0,3 % menos que en el mismo periodo de 2016.
El margen de interés subyacente se situó en 1,51 %, frente a un 1,50 % en el mismo semestre del año anterior e igual al segundo trimestre de este año.
Los depósitos se situaron en 533.200 millones de euros, un 4 % más que en el primer semestre de 2016.
Las hipotecas residenciales se incrementaron hasta los 282.400 millones, un 0,5 % más en este periodo.
Hammers también subrayó que el banco registró un dividendo por acción de 0,24 euros en el primer semestre, la misma cifra que en los seis primeros meses de 2016.
El grupo anunció el pasado octubre una reducción de 7.000 puestos de trabajo, en torno al 13 % de su plantilla, que entrañaría unos costes de unos 787 millones de euros y se dejaría notar principalmente en Holanda y Bélgica.