Investing.com – La deuda soberana española sigue ganando en atractivo para los mercados y los inversores ya exigen un interés menor a las obligaciones españolas que a las de EE.UU., un fenómeno que no se registraba desde comienzos de 2010.
Ello se produce gracias a la imparable trayectoria bajista que vive la rentabilidad del bono español desde que el pasado jueves el Banco Central Europeo (BCE) anunciase una reducción de los tipos oficiales y una serie de medidas de estímulo sin precedentes en la economía europea.
De este modo, los intereses de la deuda española a largo plazo en el mercado secundario han marcado hoy un nuevo mínimo histórico en el 2,584%, que sitúan la prima de riesgo por debajo de los 125 puntos por primera vez en cuatro años.
Además de alcanzar los niveles ofertados por el bono del Tío Sam, con este nuevo recorte de la rentabilidad, la deuda española también mete distancia con las obligaciones británicas, las cuales alcanzó el pasado viernes y que se encuentra ya a más de 5 puntos por encima de las españolas.
Pero la fiesta post-Draghi no solo es cosa de la renta fija y los mercados de acciones también dan continuidad en la apertura de hoy a los números verdes obtenidos antes de irse de fin de semana.
Al IBEX 35 le bastaron tan solo 15 minutos de negociación para marcar un nuevo máximo de cuatro años en los 11.188,2 puntos, mientras que el DAX germano volvía a probar momentáneamente los 10.000 puntos.