Lius Lidón
Antalya (Turquía), 13 nov (EFE).- A dos días del comienzo de la cumbre del G20 en Turquía, sindicatos, ONG y activistas exigieron hoy a los líderes mundiales que deben hacer más para impulsar el crecimiento económico, luchar contra la desigualdad y dar respuesta a la crisis de los refugiados y el cambio climático.
El G20, que reúne a las 20 principales economías del mundo, acordó el año pasado en su reunión en Australia acelerar el crecimiento económico un 2 por ciento adicional hasta 2018, un objetivo todavía lejano, según los líderes sindicales.
En un informe en vísperas del G20, el Fondo Monetario Internacional (FMI) reconoce que las perspectivas mundiales siguen "a la baja", lastradas por la desaceleración de China, el mal momento de los emergentes y el crecimiento anémico de la Eurozona.
EEUU, la primera economía del planeta, prevé crecer un 2,5 % este año, por encima del 1,5 % de la Eurozona o del 2,1 % de media de las economías desarrolladas.
El presidente de Estado Unidos, Barack Obama, ha asegurado en un articulo publicado hoy en el diario Financial Times que su país no puede ser el único motor del crecimiento mundial.
"Si el mundo se basa excesivamente en el consumidor estadounidense, puede ponerse en peligro la sostenibilidad de la recuperación mundial", afirmó.
El G20, en el que participan Argentina, Brasil y México, así como España como país invitado, se ha convertido en un foro crucial al reunir en una misma mesa a países que representan el 85 % de la economía mundial y el 65 % de la población del planeta.
En un encuentro a puerta cerrada, líderes sindicales de los países del G20 pidieron hoy más esfuerzos para luchar contra la desigualdad y dar además una respuesta a la actual crisis de los refugiados.
"Necesitamos políticas más proactivas en tres cuestiones: el aumento de la desigualdad en los ingresos, los altos niveles de desempleo juvenil y la crisis mundial de los refugiados", destacaron en un comunicado
La Conferencia Internacional de Sindicatos (ITUC, en sus siglas en inglés), criticó asimismo lo que califica como "falta de compasión" de los gobiernos de los países ricos frente al drama de los refugiados sirios que han huido de la guerra civil en su país, y recordó que solo Turquía acoge a unos dos millones de exiliados.
La guerra en Siria, la lucha contra los yihadistas del Estado Islámico (EI) y la crisis de los refugiados son los grandes temas políticos de esta cumbre, en la que además se tratarán numerosos asuntos económicos y financieros, como la lucha contra el fraude y la evasión fiscal.
Más de seis años después de la crisis de 2008-09, el G20 quiere fijar también en esta reunión las últimas piezas importantes de una regulación diseñada para evitar que se repitan los colapsos bancarios que llevaron a los rescates multimillonarios de entidades financieras en los Estados Unidos y Europa.