Madrid, 1 sep (EFE).- El Tesoro Público ha colocado hoy 1.000 millones de euros en la primera emisión de deuda a 50 años de su historia, de acuerdo con un comunicado del Ministerio de Economía.
Esta deuda, que pagará un cupón anual del 4 por ciento y que vencerá el 31 de octubre de 2064, se ha vendido a través de una "colocación privada".
Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA) y CaixaBank han actuado como entidades colocadoras de esta emisión, con la que el Tesoro ha cubierto ya el 78,4 por ciento del programa de emisión de deuda a medio y largo plazo.
El Ministerio de Economía ha indicado que esta emisión "muestra una vez más su fortaleza en los mercados de capitales, incluso en los plazos más largos", así como "la creciente confianza de los inversores en la recuperación de la economía española".
Además, ha recordado que el Tesoro "ya había mostrado en enero de este año su disponibilidad a ejecutar este tipo de operaciones con el objetivo de contribuir al alargamiento de la vida media de la cartera en circulación y diversificar la base inversora, todo ello llevado a cabo a precios competitivos".
A las 16.30 horas, la deuda a más largo plazo hasta ahora emitida por el Tesoro, las obligaciones a 30 años alcanzaban un rendimiento interno del 3,532 por ciento, con un aumento de 0,073 puntos, mientras que el interés de los títulos de vida más breve, a tres meses, situaban su interés en el 0,064 por ciento, con un descenso de 0,013 puntos.
Precisamente, esta misma semana el Tesoro español emitirá bonos a 10 y 30 años, con los que espera captar entre 2.000 y 3.000 millones de euros, una vez conseguido cerca del 80 % de sus necesidades de liquidez para el presente ejercicio.
Los títulos a diez años tendrán un cupón del 2,75 % y su vencimiento será el 31 de octubre de 2024, en tanto que las obligaciones a 30 años, que vencerán el 31 de octubre de 2044, tendrán un interés del 5,75 %.
El momento en el que se celebran estas emisiones es especialmente positivo para el Tesoro español, que ha encadenado recientemente varios mínimos históricos en los intereses que ofrece por la deuda, un signo que muestra la creciente confianza de los inversores en la economía española.
Las medidas anunciadas recientemente por el Banco Central Europeo y las hipótesis de que esta institución podría decidir en otoño compras de deuda también son factores que contribuyen a la reducción de tipos de interés.