Atenas, 25 feb (EFE).- El primer ministro griego, Alexis Tsipras, afirmó hoy que el acuerdo alcanzado con el Eurogrupo que permite ampliar la financiación de Grecia cuatro meses más "da aliento a la gente" y permite al Ejecutivo ganar tiempo en la negociación.
En su discurso tras la reunión con el grupo parlamentario de Syriza, Tsipras se refirió a las dificultades y al clima al que ha tenido que enfrentarse el nuevo gobierno durante las negociaciones, pero destacó su "fuerte posición negociadora".
El primer ministro hizo hincapié en lo que considera los principales beneficios del acuerdo, entre los que enumeró "cambiar el rescate por un préstamo puente, dejar atrás las medidas de austeridad, evitar la asfixia económica y acabar con el superávit primario (ingresos antes del pago de la deuda) poco realista".
En cuanto a la lista de reformas enviada a los socios, Tsipras aseguró que permite al gobierno sustituir las medidas anteriores por una serie de objetivos contemplados en su programa de Salónica, el plan de ayudas sociales para combatir la pobreza.
Subrayó que el gobierno debe acelerar su labor, especificando las reformas y llevándolas a cabo para "construir" su credibilidad respecto a la gente.
"Estamos dispuestos a incidir en cuestiones espinosas que persisten desde hace décadas", afirmó en relación con la reforma del IVA, la persecución del fraude fiscal y la corrupción, medidas con las que ya se habían comprometido a luchar gobiernos anteriores sin buenos resultados.
En el último consejo de ministros, que duró más de dos horas y media, hubo críticas a la lista de reformas por parte de miembros del Ejecutivo y algunos diputados de Syriza, que temen que el ambicioso programa de reforma social pueda verse diluido.
El ministro de Reconstrucción Productiva, Panayotis Lafazanis, negó hoy en rotundo que se vaya a producir privatización alguna en el campo de la energía, a pesar de que la lista señalaba que se respetarían las privatizaciones completadas y los procedimientos ya iniciados.
"En el sector de la energía no va a haber ninguna privatización, ni PPC (electricidad) ni DEPA (gas) ni la HEP (combustible). Lo que yo he dicho en este tema se mantiene intacto hasta el día de hoy", aseguró Lafazanis, en declaraciones recogidas por medios locales.
"La subasta para la ADME (gestora de energía) no saldrá adelante", insistió Lafazanis, quien, según fuentes gubernamentales, ya mostró sus reservas sobre la redacción final del texto de reformas por considerar que recogía "importantes diferencias respecto al programa con el que Syriza ganó las elecciones".