Madrid, 23 jun (.).- Los sindicatos mayoritarios UGT y CCOO han destacado la necesidad de atraer inversiones en el sector de componentes de automoción, especialmente baterías, para que la transición del sector se resuelva sin pérdidas en el empleo.
En este sentido, y según señalan a EFE, preocupa especialmente saber si las plantas de componentes disponen de alternativas proporcionadas por las propias empresas para continuar o adecuar su producción. En este contexto, las baterías han sido propuestas como una solución de futuro tanto por los sindicatos como por empresas como Gestamp.
Las fábricas de componentes tienen cinco veces más empleados que las de los vehículos, ha afirmado a EFE el responsable de automoción de CCOO, Joaquín Ferreira, que además ha recordado que un coche eléctrico tiene un 30 % menos de piezas que uno de combustión.
Por su parte, UGT-Fica ha elaborado un listado de 16 propuestas remitidas al Gobierno y entre las que se encuentra la jornada laboral de 32 horas -cuatro días a la semana-, la ampliación del contrato de relevo o la jubilación a los 60 años con coeficientes reductores como se hizo en la minería, por ejemplo.
Asimismo, desde este sindicato también se plantea la conveniencia de implementar un "impuesto al robot" y reclama un plan energético que homogenice los costes con Europa.
UGT-Fica también reclama la elaboración de planes estatales de mejora de contratación de jóvenes y planes de igualdad para todos los centros de trabajo, así como acuerdos para obligar a aplicar el mínimo de las condiciones de convenios sectoriales y para minimizar contratación temporal.
Ambos sindicatos coinciden en la necesidad de un "plan renove" de vehículos y otro de achatarramiento que impulse las ventas del vehículo eléctrico y retire de la circulación a los vehículos más contaminantes.
La ampliación, e incluso universalización, de contratos de relevo para más trabajadores es otra de las reivindicaciones de los sindicatos, aunque consideran que es complicado que sea aceptada por el Gobierno, "sea de un color o de otro".
Cabe recordar que el Gobierno aprobó a finales de 2018 la regulación de la jubilación parcial simultánea con un contrato de relevo para la industria manufacturera, de especial incidencia en el sector de la automoción, con lo que esperaba poder asegurar, al menos, 70.000 puestos de trabajo en los próximos cinco años.
Desde CCOO se está haciendo un mapeo del sector para conocer en profundidad cómo afectará la transición ecológica a todos los centros de trabajo de la industria, desde fábricas de automóviles hasta talleres de reparación y gasolineras.
Asimismo, Ferreira ha destacado la importancia de que haya Gobierno cuanto antes para retomar el contacto entre los distintos agentes, así como aportar certidumbre a los inversores interesados en el país.
"Más que preocupados, estamos ocupados", ha afirmado Ferreira, que cree que no se debe ser alarmista y que aún es pronto para hablar de más medidas concretas.
El dirigente del sindicato también ha afirmado que quizá sea tiempo de plantearse pedir planes industriales y de negocio a la hora de negociar los convenios colectivos, "como pedimos aumentos salariales, ya que sin centro de trabajo, no hay aumento salarial".
Preguntados sobre la actualidad del sector, Ferreira también ha destacado que no se está "despidiendo a gente", sino que se están utilizando los amortiguadores sociales presentes en el convenio colectivo para estas situaciones.
El responsable de CCOO cree que se han juntado varios factores que han perjudicado al sector automovilístico español como las elecciones, la desaceleración económica y la depreciación de la libra y de la lira turca, dos de los mercados donde más se exportaba.