FRÁNCFORT, 15 jun (Reuters) -El consejo de gobierno del Banco Central Europeo, encargado de fijar los tipos de interés, celebrará una reunión no programada el miércoles para debatir las recientes ventas en los mercados de deuda pública, lo que pone de relieve la preocupación entre bastidores por el desbordamiento de los costes de endeudamiento de algunos países de la zona del euro.
Los rendimientos de los bonos soberanos han subido fuertemente desde que el BCE prometió una serie de subidas de tipos el pasado jueves, con el diferencial entre los rendimientos de Alemania y los de los países más endeudados del sur de la Unión Europea, en particular Italia, disparándose hasta su máximo en más de dos años.
"El consejo de gobierno celebrará una reunión 'ad hoc' el miércoles para debatir las condiciones actuales del mercado", dijo un portavoz del BCE.
La reunión estaría prevista para las 0900 GMT, pero aún no está claro si se publicará un comunicado tras la misma, según fuentes con conocimiento directo.
Las invitaciones a la reunión se enviaron el martes y algunos responsables de la política monetaria, que se esperaba que asistieran a una conferencia en Milán el miércoles, cancelaron sus intervenciones.
La última vez que el BCE celebró una reunión de emergencia en momentos de tensión en los mercados puso en marcha el programa de compras de emergencia frente a la pandemia (PEPP, por sus siglas en inglés), un plan de compra de bonos por valor de 1,7 billones de euros (1,78 billones de dólares) que resultó ser su principal herramienta durante la pandemia de COVID-19.
Las opciones que tiene el BCE para combatir el llamado riesgo de fragmentación -cuando algunos países se enfrentan a costes de endeudamiento notablemente más elevados que otros en el mismo bloque monetario- incluyen la canalización de reinversiones de los vencimientos a los mercados que experimentan tensiones, o la creación de un instrumento totalmente nuevo. Algunos analistas han advertido, sin embargo, que es poco probable que las reinversiones por sí solas sean suficientes.
La reunión tiene lugar el mismo día en que se espera que la Reserva Federal de Estados Unidos suba los tipos de interés, posiblemente hasta 75 puntos básicos, un giro en las expectativas que ha alimentado unas fuertes ventas en los mercados mundiales.
La noticia de la reunión del BCE disparaba el euro alrededor de medio punto porcentual hasta 1,0487 frente al dólar, los rendimientos italianos a diez años caían 22 puntos básicos y los futuros del mercado bursátil italiano subían con fuerza.
Previamente, los rendimientos alemanes a diez años, una referencia para la unión monetaria de 19 países, alcanzaron el miércoles el 1,77%, su nivel más alto desde principios de 2014, mientras que sus equivalentes italianos subieron 240 puntos básicos, el mayor diferencial desde principios de 2020.
La jefa de operaciones de mercado del BCE, Isabel Schnabel, dijo el martes que el BCE estaba vigilando "de cerca" la situación y que estaba preparado para desplegar tanto las herramientas existentes como las nuevas si encontraba que la revalorización del mercado era "desordenada".
"No toleraremos cambios en las condiciones de financiación que vayan más allá de los factores fundamentales y que amenacen la transmisión de la política monetaria", dijo Schnabel, añadiendo que no había límites a su compromiso de evitar la fragmentación.
Sostuvo que, como primera línea de defensa, el BCE podría desplegar el efectivo de los bonos que vencen en los mercados en tensión y, si fuera necesario, el banco podría idear un nuevo instrumento.
Sin embargo, Schnabel se mostró en contra de anunciar un instrumento de forma preventiva, ya que tendría que adaptarse a una situación concreta, con condiciones, límites y salvaguardas establecidas caso por caso.
"Ahora estamos hablando. Sólo hablamos, pero es un comienzo", dijo Frederik Ducrozet, economista de Pictet Wealth Management.
"Deberíamos obtener una declaración que refleje la voluntad de actuar y entonces quizá también se encargue a las comisiones que trabajen en las opciones, esto es lo que faltaba la semana pasada", añadió Ducrozet.
(1 dólar = 0,9542 euros)
(Reporte de Balazs Koranyi, Francesco Canepa y Frank Siebelt; edición de Jacqueline Wong, Sam Holmes, Carmel Crimmins y Tomasz Janowski; traducción de Darío Fernández y José Muñoz en la redacción de Gdansk)