Washington, 16 abr (.).- El Fondo Monetario Internacional (FMI) mejoró este martes su previsión de crecimiento económico para Brasil en 2024 y 2025, años en los que consideró que el PIB del país avanzará un 2,2 y un 2,1 %, respectivamente.
Su informe de perspectivas económicas globales, publicado en el marco de las reuniones de primavera que el organismo celebra esta semana en Washington junto con el Banco Mundial, actualiza el publicado el pasado enero.
En este tiempo, el pronóstico para 2024 se revisa al alza cinco décimas y el de 2025 en dos décimas. En 2023 la economía brasileña creció un 2,9 %, por lo que en ambos casos esas cifras suponen a pesar de todo una desaceleración.
El FMI apunta en su informe que la moderación anticipada en la economía brasileña es fruto de la consolidación fiscal, efectos rezagados de una política monetaria todavía restrictiva y una menor contribución de la agricultura al crecimiento.
La previsión sobre Brasil no se aleja demasiado de la estimada para el conjunto de Latinoamérica y el Caribe, donde el PIB pasará del 2,3 % de 2023 a, según los cálculos, el 2 % este año y el 2,5 en 2025. En el primer caso supone un alza de una décima respecto a lo estimado en enero, y en 2025 no hay cambios.
Brasil, no obstante, se sitúa por encima de Sudamérica en su conjunto, región que tras haber crecido un 1,5 % en 2023 rebaja su crecimiento económico al 1,4 % el año que viene y lo aumenta al 2,7 % en 2025.
El FMI incluye en su informe cifras de inflación y prevé que el índice de precios al consumo de Brasil se sitúe en el 4,1 % este año, cinco décimas menos que en 2023, y en el 3 % en 2025, muy por debajo de los porcentajes del 24,7 y del 10,1 % previstos para el conjunto de Sudamérica en este 2024 y 2025, respectivamente.
Brasil es uno de los integrantes del G20, grupo de países al que se refiere en su informe el FMI para destacar que el crecimiento económico en sus diez mercados emergentes ha superado consistentemente el de las economías avanzadas en las dos últimas décadas.
La organización apunta que a medida que su participación en el PIB mundial "se ha más que duplicado", Argentina, Brasil, China, la India, Indonesia, México, Rusia, Arabia Saudí, Sudáfrica y Turquía han seguido integrándose en la economía global, principalmente a través del comercio y de las cadenas de suministro. Brasil, en concreto, es un destacado productor de materias primas agrícolas y minerales.