Madrid, 9 mar (.).- Los fondos soberanos invirtieron entre octubre de 2020 y diciembre de 2021 en 12 empresas españolas un importe superior a los 2.800 millones de euros, un volumen de inversión solo superado en los años 2011 y 2009 de la serie histórica, según el informe "Fondos soberanos 2021".
De acuerdo con el estudio, elaborado por IE University e ICEX-Invest in Spain, ese volumen de inversión supuso más del doble respecto al registrado en el informe anterior (1.300 millones de euros) que analizaba un periodo más largo, desde enero de 2019 a septiembre de 2020.
El fondo GIC de Singapur y el Mubadala de Abu Dabi han sido los más activos en España por volumen y número de operaciones.
La secretaria de Estado de Comercio, Xiana Méndez, ha destacado durante la presentación del informe que estos datos "permiten anticipar tendencias globales para reforzar el atractivo de España ante la comunidad inversora internacional".
Asimismo, Méndez ha subrayado que el comercio exterior español "está siendo un motor indiscutible para la recuperación económica de nuestro país" y ha celebrado el cambio de tendencia de las inversiones internacionales.
El investigador responsable de fondos soberanos en IE University, Javier Capapé, ha lamentado que en España generalmente "siempre miramos a Estados Unidos" para saber cómo atraer inversiones, pero que, sin embargo, "China nos está pasando por la derecha", ya que cada año acumula una mayor inversión.
LA ACTIVIDAD GLOBAL DE LOS FONDOS SOBERANOS AUMENTÓ UN 171 %
Los 98 fondos soberanos activos en 2021, pertenecientes a 70 países, realizaron 450 operaciones en todo el mundo, un 171 % más que en el periodo anterior.
Los fondos Temasek y GIC, ambos de Singapur, fueron los más activos a nivel global.
Estados Unidos fue de nuevo el primer destino de los fondos de inversión, seguido de India, China y el Reino Unido.
Las empresas tecnológicas fueron las que captaron un mayor interés, ya que la inversión en este sector representó casi el 42 % de todas las transacciones, siendo las empresas de software, las fintech, los neobancos y las empresas relacionadas con las criptomonedas las que recibieron una mayor inversión de fondos soberanos.
Las empresas de biotecnología y tecnología de la salud también recibieron un importante nivel de inversiones con operaciones en 15 países distintos, entre ellos Finlandia, Vietnam y España, donde GIC invirtió 1.000 millones a través de Biomat, su filial en Estados Unidos.
En este sentido, Capapé ha destacado el se está produciendo un "proceso de transformación económica y social acelerado por la pandemia y la crisis geopolítica" en el que "empresas privadas tecnológicas en un amplio espectro de industrias atraen cada vez más al dinero institucional".
A su juicio, los fondos soberanos tiene una "visión de largo plazo que permite apostar por compañías que están transformando la manera da luchar contra el cambio climático (renovables y nuevas energías), de entender el dinero (fintech y crypto), de proporcionar seguridad alimentaria (agritech) o de acelerar la economía circular".