Por Michael Nienaber y Rene Wagner
BERLÍN, 8 sep (Reuters) - El Reino Unido está a punto de perder su condición de uno de los diez principales socios comerciales de Alemania este año por primera vez desde 1950, ya que las barreras comerciales surgidas tras el Brexit están llevando a las empresas de la mayor economía de Europa a buscar negocios en otros lugares.
El Reino Unido abandonó el mercado único de la Unión Europea a finales de 2020, tras más de cuatro años de disputas sobre los términos de su divorcio, durante los cuales las empresas alemanas ya habían comenzado a frenar sus vínculos con sus socios británicos.
En los primeros seis meses de este año, las importaciones alemanas procedentes de Reino Unido se hundieron casi un 11% interanual, hasta los 16.100 millones de euros (19.000 millones de dólares), según datos de la Oficina Federal de Estadística alemana revisados por Reuters.
Mientras que las exportaciones alemanas a Reino Unido aumentaron un 2,6% hasta 32.100 millones de euros, eso no pudo evitar un descenso en el comercio bilateral, de un 2,3% hasta 48.200 millones de euros, lo que hizo que Reino Unido descendiera desde el noveno hasta el undécimo puesto, y desde el quinto antes de que votara a favor de abandonar la UE en 2016.
Una encuesta de diciembre de 2020 de la asociación comercial alemana BGA mostró que una de cada cinco empresas estaba reorganizando las cadenas de suministro para cambiar a los proveedores británicos por otros de la UE.
Esa tendencia se estaba acentuando, aunque las empresas británicas están aún peor, dijo Michael Schmidt, presidente de la Cámara de Comercio Británica en Alemania, lo que hace improbable cualquier cambio de rumbo antes de finales de este año.
"Cada vez más pequeñas y medianas empresas están dejando de comerciar (con Reino Unido) debido a estos obstáculos (surgidos tras el Brexit)", dijo Schmidt a Reuters.
El fuerte descenso del primer semestre también fue impulsado por el efecto de arrastre antes de que entraran en vigor en enero los nuevos obstáculos, como los controles aduaneros.
"Muchas empresas anticiparon los problemas (...) por lo que decidieron adelantar las importaciones aumentando las existencias", dijo.
"COMO PEGARSE EN EL PIE"
Aunque este efecto impulsó el comercio bilateral en el cuarto trimestre, redujo la demanda a principios de este año, mientras que los problemas con los nuevos controles aduaneros también complicaron el comercio a partir de enero.
Un desglose de datos mostró que las importaciones alemanas de productos agrícolas británicos cayeron más de un 80% en los primeros seis meses del año, mientras que las importaciones de productos farmacéuticos se redujeron casi a la mitad.
"Muchas pequeñas empresas no pueden permitirse la carga adicional que supone estar al día y cumplir todas las normas aduaneras, como los certificados sanitarios para el queso y otros productos frescos", dijo Schmidt.
Pero las nuevas realidades comerciales han perjudicado a las empresas británicas incluso más que a las alemanas, que están más acostumbradas a lidiar con los diferentes regímenes aduaneros de todo el mundo, ya que muchas llevan décadas exportando a varios países no europeos.
"En Reino Unido, el panorama es diferente", dijo Schmidt, añadiendo que muchas pequeñas empresas de ese país habían exportado principalmente a la UE, por lo que tuvieron que empezar de cero al enfrentarse a los nuevos controles aduaneros.
"Para muchas pequeñas empresas británicas, el Brexit significó perder el acceso a su mercado de exportación más importante. (...) Es como pegarse un tiro en el pie. Y esto explica que las importaciones alemanas desde Reino Unido estén ahora en caída libre".
Schmidt expresó su esperanza de que parte del descenso pueda ser temporal. "Normalmente, las empresas siempre están en buena posición para adaptarse rápidamente, pero esto necesita tiempo".
(1 dólar = 0,8455 euros)
(Reportaje de Michael Nienaber; edición de John Stonestreet; traducido por Darío Fernández)