Madrid, 1 nov (.).- EiDF registró unas pérdidas de 6,9 millones de euros hasta junio, frente a unos números rojos de 396.000 euros en el mismo periodo de 2022, por la fase de desarrollo de su porfolio de generación fotovoltaica y de instalaciones de autoconsumo financiadas con contratos PPA.
No obstante, el grupo facturó 98 millones de euros, un 16 % más homogeneizando el precio de la energía con los valores actuales, y su resultado bruto de explotación (ebitda) agregado alcanzó los 23,4 millones, destaca la compañía gallega, que da por superada la crisis y se centra en este ejercicio y en las perspectivas para 2024.
Aunque los números se corresponden con los del primer semestre, el grupo ofrece datos a cierre de octubre de la deuda financiera a corto plazo, que se ha reducido en más de 50 millones de euros, es decir, un 55 % respecto a diciembre de 2022, con lo que acelera la reestructuración financiera y la mejora del fondo de maniobra.
Desde el punto de vista de EiDF, ello tendrá un impacto significativo para mejorar la estabilidad financiera, la liquidez y mejorar la calificación crediticia, lo que facilita el acceso al capital y la obtención de condiciones de financiación favorables.
Periodo complejo
El pasado 14 de abril, la cotización de EiDF fue suspendida en el BME (BME:BME) Growth, una decisión adoptada de forma cautelar por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) mientras la compañía difundía información relevante sobre el proceso de formulación de cuentas y publicación de información financiera auditada de 2022.
En concreto, la solar gallega encargó a Deloitte ese mes que realizara un análisis forensic de sus cuentas y analizara "las incidencias o discrepancias detectadas" por PwC en el proceso de auditoría de las cuentas, tal como reconoció entonces al mercado.
La suspensión de cotización se prolongó durante cuatro meses, recuerda ahora la sociedad, que sigue manteniendo su actividad en todas sus unidades de negocio y presume de mantener el "liderazgo" en el sector del autoconsumo, con una cartera de más de 70 megavatios (MW) para 2024.
Nuevo modelo de gobierno
En una comunicación relevante enviada en la noche de este martes al BME Growth, la compañía informa de una salvedad en el informe de revisión limitada de los estados financieros intermedios consolidados del primer semestre.
En él, los auditores de PwC se remiten al trabajo realizado respecto al ejercicio 2022, en el que se pusieron de manifiesto "incidencias relevantes" relacionadas con la existencia de "debilidades significativas" en el modelo de gobierno corporativo y en el sistema de control interno de la sociedad.
Así, si bien los administradores ya han ido adoptando medidas para solventar la situación, "dada la relevancia de las incidencias detectadas", los expertos no pueden asegurar que "no pudieran surgir otras cuestiones no identificadas hasta el momento que, en su caso, pudieran suponer otros posibles errores no recogidas en los estados financieros intermedios".
La sociedad se remite, a este respecto, al modelo de gobierno corporativo "dualista" que está implementando, con el que busca "establecer un equilibrio".
En esta línea, a comienzos de octubre, el consejo de administración de EiDF dio el visto bueno a la incorporación de Joaquín Galí Rogent como nuevo consejero delegado del grupo que preside Fernando Romero.
Este nuevo modelo de gobierno "se caracteriza por una clara y eficaz división de roles entre supervisión y gestión", defiende EiDF, que estima que, a final de año o como tarde en el primer trimestre de 2024, la nueva estructura "estará completamente implementada".
Con todas las medidas y la puesta en marcha inmediata del equipo de auditoría interna, la sociedad "habrá resuelto de manera plenamente satisfactoria cualquier debilidad de gobierno corporativo que pudiera tener a fecha", sentencia.