Por Ileana García Mora
Investing.com – Un día después de que el Banco Central de México (Banxico) anunciara un recorte de 25 puntos base en las tasas de interés a un nivel de 8%, el presidente Andrés Manuel López Obrador aplaudió la medida, pues considera que fomentará el crecimiento económico del país.
“De esta manera se estimula el crecimiento, hay más estímulos para invertir, para apoyarse con créditos; es más rentable para la actividad productiva una tasa de interés más baja; y se puede hacer esto porque hay estabilidad, porque si bajan las tasas y no hay confianza en la economía de México, se podrían generar desajustes, pero se bajaron las tasas y no pasó nada, al contrario, se mejoró el peso ayer, no se depreció”, dijo el primer mandatario nacional.
La economía mexicana ha mostrado señales de desaceleración. El dato más reciente sobre PIB de México mostró que la economía creció únicamente 0.1% en el segundo trimestre de 2019. Y aunque el índice general de precios ha registrado una disminución, la inflación subyacente sigue afectando, siendo este el reto principal del Banxico.
“Creo que fue buena la decisión, respeto la decisión de Banxico, que es autónomo, nosotros no nos metemos, cada uno con lo que tiene encomendado”, dijo López Obrador en su acostumbrada rueda de prensa de las mañanas. Aunque también dijo que "opinan más de la cuenta" por hacer recomendaciones en política monetaria.
López Obrador mencionó que, aunque existen factores externos que muestran un panorama global poco favorable, la economía mexicana “está bien”. “Hay proyecciones de que la economía mundial puede caer en recesión, problemas es Europa, menor crecimiento en China, problemas de aranceles, guerra comercial entre China y Estados Unidos, incluso todo lo que está pasando en Argentina podría tener algún efecto en México, pero pensamos que estamos bien nosotros”.
Pide “profesionalismo” a las calificadoras
El primer mandatario nacional pidió a las calificadoras que actúen con profesionalismo, pues según él, intentan bajar la calificación crediticia de México.
“Le estamos pagando como 300 millones de dólares al año a tres calificadoras... Podríamos tener dos, que es lo que se pide en el mundo de las finanzas, no tres. Sin embargo, decidimos mantener las tres para que no se piense que tomamos represalias porque intentan bajar la calificación. No. Son libres, y somos respetuosos”.