Madrid, 25 jun (.).- Los expertos del consenso económico y empresarial de PwC han revisado al alza su previsión de incremento del producto interior bruto (PIB) hasta el 1,9 % para 2023, cinco décimas más que su pronóstico anterior, gracias al buen desarrollo de las exportaciones y de la inversión productiva.
El informe, correspondiente al segundo trimestre y elaborado a partir de la opinión de 450 expertos, ha rebajado en una décima el crecimiento del PIB para el 2024 hasta el 2 %.
En cuanto a la inflación, los expertos estiman que, a finales de 2023 se situará en torno al 3,3 % y, en junio de 2024, en el 2,9 %.
El estudio concluye que no se espera "un decaimiento económico inmediato por la subida de tipos", después de que hayan aumentado en más de 30 puntos (hasta el 50,5 %) los empresarios que califican el momento actual de la economía como "bueno".
Además, más del 90 % asegura que en el próximo trimestre la situación será igual o mejor, mientras que, para dentro de un año, el 47 % considera que la actividad irá en ascenso y el 30 %, que se mantendrá igual.
Detrás de este optimismo, "se encuentra la buena situación financiera de las empresas", que se mantendrá "inalterable en los próximos meses", según el 73 % de los expertos, por las exportaciones y la inversión.
En el primer caso, casi la totalidad (90 %) de los panelistas considera que aumentarán o permanecerán estables en los próximos seis meses, mientras que este porcentaje se sitúa en el 80 % en el caso de la inversión productiva.
Por el contrario, casi el 78 % cree que la situación económica y financiera de las familias es mala o regular y el 74 % espera que esto se mantenga durante el próximo trimestre, lo que debilitará la demanda de la vivienda, aunque el consumo resistirá mejor.
LOS RETOS ECONÓMICOS DE LA PRESIDENCIA EUROPEA
El informe concluye que el reto económico prioritario de la presidencia española del Consejo de la Unión Europea (UE) es que los países cierren un acuerdo definitivo sobre el pacto de estabilidad y crecimiento planteado por la Comisión Europea (CE).
En este sentido, casi el 70 % pide que se establezca que el ratio de deuda y PIB de los países deba ser previsiblemente inferior al final del plan de cuatro años, mientras que el 58 % demanda que el gasto neto se mantenga siempre por debajo del crecimiento económico potencial y el 55 % reclama sanciones para los que no cumplan.
Además, menos de la mitad (49 %) se muestra a favor de mantener el criterio de que el déficit no supere el 3 % del PIB y la deuda, el 60 %.
Con respecto a la inversión, los encuestados consideran prioritario aumentar el gasto en infraestructuras digitales, seguido de la seguridad y defensa, mientras que el 65 % cree necesario alcanzar un pacto en inmigración y el 52 %, regular el precio del mercado eléctrico.
También reclaman aprovechar para realizar un balance y una evaluación objetiva sobre el despliegue de los fondos Next (LON:NXT) Generation y trabajar para reactivar las relaciones con América Latina.