Nueva York, 28 jul (EFE).- Los responsables del aeropuerto John
F. Kennedy de Nueva York anunciaron hoy un proyecto por el que se
mejorará una de sus pistas con la intención de reducir los retrasos
en los vuelos que operan en el concurrido aeródromo internacional.
Las obras, con un coste de 376,3 millones de dólares, forman
parte de la segunda fase de un programa especial que diseñaron las
autoridades del aeropuerto neoyorquino, la principal puerta de
entrada por aire a Estados Unidos, para reducir los retrasos en los
vuelos que se operan en sus pistas.
La reconstrucción se centrará en una de las cuatro pistas del
JFK, la conocida como "Bay Runway" ("pista bahía", en su traducción
del inglés) ó 13-31, que tras la ejecución de las obras contará con
una amplitud de 61 metros, comparados a los 45 metros actuales, y un
nuevo sistema eléctrico y de drenaje.
"La ampliación y mejora de la pista ahorrará tiempo a los
pasajeros, reducirá los retrasos y los gastos asociados con la
congestión del aeropuerto, y proveerá a la región de un considerable
desarrollo económico", dijo el gobernador del estado de Nueva York,
David Paterson, quien participó hoy en el anuncio del proyecto.
Según explicaron las autoridades, las obras reducirán los
retrasos en los vuelos en alrededor de 10.500 horas anuales y,
además, crearán mil puestos de trabajo directos y 1.500 indirectos.
Una de las principales mejoras que se aplicarán será la
construcción de espacios en los que los aviones podrán aguardar su
orden de despegue sin crear colas de espera, así como el
establecimiento de la creación de las llamadas "salidas de alta
velocidad".
Las obras cuentan con la financiación de la Administración
Federal de Aviación (FAA, en sus siglas en inglés) y de la Autoridad
Portuaria de Nueva York y Nueva Jersey (PANYNJ), así como con el
apoyo de numerosos parlamentarios y senadores neoyorquinos.
"El resultado de este proyecto se traducirá en la mejora de la
experiencia de los viajeros que pasen por el aeropuerto. Gracias a
materiales más resistentes, configuraciones más inteligentes y un
trabajo en equipo extraordinario, conseguiremos un gran éxito", dijo
este martes el presidente de la PANYNJ, Anthony Coscia.
La pista 13-31 permanecerá cerrada durante 120 días en 2010, algo
que afectará a los horarios actuales de los vuelos que operan
distintas aerolíneas y que hará que el resto de pistas del JFK
operen a su máximo rendimiento. EFE