México, 21 oct (EFE).- El Gobierno de México otorgó 15 permisos,
de un total de 35 solicitudes recibidas, para la realización de
siembras experimentales de maíz genéticamente modificado, informaron
hoy las secretarías de Agricultura (Sagarpa) y de Medio Ambiente
(Semarnat).
Ambos ministerios indicaron en un comunicado que los permisos
otorgados por la Sagarpa y con análisis vinculante de la Semarnat
"están estrictamente apegados a la Ley de Bioseguridad Sobre
Organismos Genéticamente Modificados y a su Reglamento".
Los dos primeros permisos fueron otorgados la semana pasada, lo
que generó la crítica de grupos ambientalistas que se oponen a este
método de siembra.
Del total de permisos entregados, nueve son para la empresa
Monsanto Comercial y seis para la empresa Dow AgroScience/PHI
México, agregaron la Sagarpa y Semarnat.
De los correspondientes a Monsanto Comercial, tres se realizarán
en los campos del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales,
Agrícolas y Pecuarias, situados en el municipio de Cajeme, en el
norteño estado de Sonora, fronterizo con Estados Unidos.
Otros tres en los municipios de Ahome, Guasave y Navolato, en el
estado de Sinaloa (noroeste), y tres en los municipios de Valle
Hermoso, Matamoros y Río Bravo, en el estado de Tamaulipas,
fronterizo con EE.UU.
En cuanto a los seis otorgados a Dow AgroScience/PHI México, tres
están en el Valle del Yaqui y Huatabampo, en Sonora, y tres en
municipios de Sinaloa.
El ministro del Medio Ambiente, Juan Rafael Elvira Quesada,
señaló que el Gobierno Federal trabaja en este tema "sin dejarse
influenciar por ningún tipo de presión, sino en apego a los tiempos
que marca la ley, ya que lo más importante es dar a la sociedad la
garantía de que se está haciendo el mejor de los trabajos".
Por su parte, el director del Servicio Nacional de Sanidad
Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), Enrique Sánchez,
explicó que para establecer las medidas de bioseguridad que se
aplicarán en las siembras experimentales se tomaron en cuenta
opiniones técnicas y científicas.
Aclaró que estas siembras se mantienen en la fase de experimento
y se harán en terrenos controlados y totalmente aislados de otro
tipo de cultivos.
Grupos ambientalistas mexicanos, entre ellos Greenpeace, están en
contra de esta iniciativa porque consideran que pone en peligro la
biodiversidad del país, que es además el lugar de origen del
maíz.EFE