La Paz, 26 oct (EFE).- Los líderes de Potosí ratificaron hoy su
convocatoria a una huelga para mañana y el miércoles que exigirá al
Gobierno boliviano la anulación de un contrato que permite a la
firma estadounidense Cour D'Alene operar en la cima del Cerro Rico.
Celestino Condori, presidente del Comité Cívico de Potosí, que
agrupa a las diversas organizaciones de la región, dijo hoy a Efe
que esa es la primera demanda regional que plantean al Ejecutivo
que, sin embargo, el domingo ya descartó anular el contrato.
Según Condori, la huelga será secundada por varios sectores,
salvo las oficinas del Gobierno, e incluirá el bloqueo de calles y
de carreteras de acceso y salida de la ciudad, a diferencia de otro
realizado la semana pasada que no fue seguido por transportistas.
Los dirigentes potosinos exigen que se paralice definitivamente
la explotación de minerales en la cúspide del Cerro Rico porque
temen daños que le hagan perder su forma cónica y su importancia
como monumento nacional y atractivo turístico internacional.
El Gobierno de Evo Morales ha ordenado a la compañía Manquiri,
filial de la estadounidense Cour D'Alene, que cese las operaciones
en la cima hasta que se concluya en cinco meses un estudio sobre la
estructura del cerro y sus potenciales riesgos.
Sin embargo, la decisión no satisface a los líderes cívicos de
Potosí, que piden la anulación del contrato que tiene Manquiri para
explotar la montaña por encima de los 4.400 metros de altitud, una
zona donde hay una alta concentración de minerales.
La montaña, cuya cima se encuentra sobre los 4.702 metros de
altitud y ha sido explotada sin parar desde 1545, se convirtió en su
momento en la principal fuente de los ingresos de la colonia
española en América gracias a sus gigantescos yacimientos de plata.
La significación histórica y económica del Cerro Rico le han
valido estar en el escudo de armas de Bolivia y que la ciudad de
Potosí fuera nombrada en 1986 Patrimonio Natural y Cultural de la
Humanidad por la Unesco.
El comité cívico potosino también demanda la renuncia del
presidente de la Corporación Minera de Bolivia (COMIBOL), Hugo
Miranda, por considerar que no apoya el desarrollo minero potosino.
Al mismo tiempo, exigen que la empresa constructora brasileña OAS
"cumpla con su compromiso de reanudar las obras" de construcción de
una carretera en la región de Potosí (suroeste), que conectará con
Tarija (sureste).
De igual forma, solicitan que el Gobierno muestre avances en su
proyecto de montar una fábrica de cemento en Potosí, para darle a la
región una alternativa laboral a la minería.
Una fuente del Ministerio de Minería dijo a Efe que no tienen
previsto reunirse con los cívicos para analizar sus peticiones,
porque están preparando para mañana la inauguración de una planta
estatal productora de planchas de cobre en la región de La Paz.
En todo caso, el ministro de Minería, Luis Alberto Echazú,
descartó el domingo una eventual anulación del contrato con Manquiri
porque se "pone en riesgo al país".
En cambio, destacó que el Estado ordenó estudios geotécnicos para
conocer los lugares críticos del Cerro Rico e instruyó a la filial
estadounidense dejar de explotar la cima hasta esperar los
resultados de esa investigación. EFE