Nueva York, 24 feb (EFE).- La firma británica Diageo, el mayor
productor mundial de bebidas alcohólicas, acusó hoy directamente a
Bacardí de promover una campaña para que deje de producir ron en
EE.UU. y ella pueda mantener, así, el control sobre las subvenciones
millonarias que recibe por la venta de ese licor en este país.
"Bacardí ha estado cabildeando contra nosotros y a favor de un
proyecto de Ley presentado al Congreso de EE.UU. por Puerto Rico, y
ha impulsado una campaña de desinformación", dijo hoy Efe la
vicepresidenta de Relaciones Corporativas y Política Pública de
Diageo, Virginia Sánchez.
Esta compañía, que comercializa marcas tan conocidas como Johnnie
Walker, J&B, Cardhu, Smirnoff, José Cuervo, Gordon's, Cacique,
Pampero y Guinnes, acordó en 2008 trasladar su producción del ron
Captain Morgan -el segundo más vendido en este país- de Puerto Rico
a las Islas Vírgenes de EE.UU., y mantenerla allí durante 30 años a
cambio de suculentos incentivos económicos.
Recientemente autoridades y organizaciones puertorriqueñas han
advertido de que la salida de Diageo destruirá cientos de empleos en
Puerto Rico, que además dejará de ingresar unos 115 millones de
dólares anuales por impuestos sobre la venta de ron.
Las autoridades de Puerto Rico incluso han pedido la intervención
del Congreso de EE.UU. para que medie en este asunto, en el que, sin
embargo, hasta ahora no se había implicado directamente a Bacardí,
una firma de origen cubano que tiene su sede en Bermudas y que
también produce su ron en ese estado libre asociado.
Diageo asegura que Bacardí es "el más grande destinatario de
subsidios públicos de ron del mundo" y que está detrás de "una
campaña secreta de desinformación para echar de EE.UU. a un
competidor y destruir la economía de las Islas Vírgenes".
El primero en denunciar públicamente esta supuesta campaña fue el
vicepresidente ejecutivo de Diageo, Guy Smith.
Smith afirmó en un boletín publicado el martes que "una histórica
medida que podría sacar de la crisis a las Islas Vírgenes de EE.UU.
está siendo atacada por intereses corporativos de una rica familia
que busca mantener el control ejercido por décadas sobre los
subsidios al ron".
"Bacardí recibe muchísimo dinero del Gobierno puertorriqueño,
aunque no sabemos cuánto exactamente", explicó Sánchez, quien
aseguró que la intención de su compañía es "quedarse en EE.UU. y
confiar en que finalmente podrá trasladar la producción de su ron a
las Islas Vírgenes", donde se está construyendo una destilería de
170 millones de dólares que dará empleo a entre 60 y 70 personas.
EFE