Ginebra, 5 jun (EFE).- La ministra de Economía de Ecuador, Elsa
Viteri, afirmó hoy sentirse "feliz" por cómo se está desarrollando
el proceso de recompra de la deuda comercial del país, dos días
después de que terminase el último plazo dado a los tenedores de
Bonos 2012 y 2030 para que aceptaran la oferta de 35 centavos de
dólar por bono.
La ministra señaló en conferencia de prensa en Ginebra que "ayer
terminó la revisión de las ofertas", pero no quiso dar ninguna cifra
sobre cuánto pagará finalmente el Gobierno porque "el proceso de
conciliación no está terminado", aunque indicó que el precio del 35
por ciento del valor nominal es el máximo.
"La respuesta, con el resultado final de la subasta, la daré el
12 de junio, a través de la Bolsa de Luxemburgo. Ahora no puedo
definir los montos finales. Ese día se van a presentar los datos
definitivos y ordenaremos la transferencia del pago", señaló.
Sí indicó que el monto total de la deuda que se quiere saldar es
de 3.210 millones de dólares, que corresponden a 2.700 millones por
los Bonos 2012 y 2.700 millones por los Bonos 2030, los dos tipos de
bonos que Ecuador consideró "ilegítimos" en la Auditoría que se
realizó, por creer que fueron contratados o renegociados de forma
irregular y con perjuicio para el país.
En cambio, subrayó que los bonos 2015 "los estamos pagando porque
eran una decisión de otra índole... su emisión fue productos de una
decisión soberana del Gobierno de la época".
"Yo estoy feliz. Me siento satisfecha no sólo por lo que se ha
logrado sino por lo que le vamos a brindar al país. Es la respuesta
que ellos esperaban, tengo una sonrisa en la cara", insistió la
ministra, quien participó hoy en un debate sobre "Deuda externa y
Derechos humanos".
"Estamos muy contentos con lo que hemos realizado, que se ha
tratado de un esquema de renegociación totalmente distinto",
subrayó.
Aunque no quiso entrar en qué porcentaje de la deuda en cuestión
ya ha sido aceptado por los tenedores para su venta al precio fijado
por el gobierno, indicó que "esperamos que la cantidad de bonos que
queden en el mercado aún después de esta operación sea mínima, y
ojalá que no quede nadie y hayamos extinguido de manera definitiva
esa deuda.
Indicó que el 29 de mayo ya se cancelaron los montos a los
tenedores que hasta esa fecha habían ofertado sus posiciones al
precio final establecido por el gobierno o por debajo de ese, antes
de ampliarse el plazo final al 3 de junio.
"Todo lo que hemos hecho ha sido por el bien del país y con el
afán de reparar una situación histórica que ha perjudicado
significativamente a nuestro pueblo", añadió.
La ministra rechazó que esta operación para acabar con la deuda
comercial de Ecuador -"la más costosa" y que supone un casi un
tercio de la deuda total del país- pueda tener efectos negativos
para la credibilidad de éste o para la percepción de riesgo.
"Durante años pagamos la deuda, esperábamos un indicador
favorable, y nunca lo tuvimos. Ahora estamos en un proceso
transparente, ¿por qué va a perjudicarnos?", preguntó.
"Las cosas están cambiando en el mundo. Se ha demostrado que las
verdades absolutas no eran ciertas, y menos aún en el plano
financiero. Nosotros no venimos a imponer, sólo reclamamos el
derecho a ser escuchados. El Sur también habla, el Sur también
piensa y esa es nuestra posición", señaló. EFE