Por Byron Kaye y Philip Pullella
(Reuters) - La policía australiana acusó el jueves a un importante asesor del Papa Francisco de múltiples delitos sexuales, en un caso que plantea un dilema para el pontífice que ha prometido no tolerar esta clase de delitos.
El cardenal George Pell es el ministro del Tesoro del Vaticano y es el alto cargo de mayor rango del Vaticano acusado de abuso sexual.
Pell se enfrenta a "cargos múltiples por delitos sexuales históricos" de varios denunciantes, dijo la policía en el estado australiano de Victoria, donde Pell fue sacerdote en la década de 1970.
La policía no especificó los cargos contra Pell, ni las edades de las presuntas víctimas, ni cuando se alegaba que habían ocurrido los crímenes.
La Iglesia Católica de Australia dijo en un comunicado que Pell niega enérgicamente las acusaciones y planea regresar al país para "limpiar su nombre".
"Dijo que espera su día en la corte y se defenderá enérgicamente de las acusaciones", dijo el comunicado. También dijo que sus médicos le aconsejarían sobre sus planes de viaje.
Pell enfureció el año pasado a las víctimas en una investigación gubernamental sobre abuso infantil institucional en Australia al decir que estaba demasiado enfermo para volar a su país, testificando en cambio desde Roma.
Se le ordenó comparecer ante el Tribunal de Magistrados de Melbourne el 18 de julio. El cardenal ofrecerá una declaración en el Vaticano más tarde el jueves.
(Información adicional de Tom Westbrook en Sídney. Editado en español por Carlos Aliaga)