Washington, 15 jun (EFE).- Estados Unidos y México firmaron hoy
un acuerdo para fortalecer, con más agentes, tecnología y controles
fronterizos, el combate a la narcoviolencia sin entorpecer el flujo
legítimo de personas y comercio en la frontera común.
El convenio fue suscrito por la secretaria de Seguridad Nacional
de EE.UU., Janet Napolitano, y el titular de Hacienda de México,
Agustín Carstens, quien hoy tiene previsto, además, encuentros con
analistas económicos y financieros de los principales bancos y
fondos de inversión.
Durante una rueda de prensa conjunta, Carstens y Napolitano
explicaron que el pacto, que da seguimiento a uno suscrito en 2007,
se apoya en tres pilares: el fortalecimiento de la cooperación en la
seguridad fronteriza; la capacitación de más agentes aduaneros en
México y la agilización de los trámites aduaneros en la frontera.
Ambos funcionarios también dejaron en claro que no se tolerará la
corrupción de los agentes aduaneros que, presionados o amenazados
por los carteles de la droga, hagan la vista gorda para permitir el
contrabando de drogas, armas y dinero.
Napolitano y Carstens firmaron una "carta de intención" para
fortalecer la cooperación aduanera entre ambos países, tal como
habían acordado los presidentes Barack Obama y Felipe Calderón tras
su encuentro en abril pasado.
Se trata "del siguiente paso" en la cooperación bilateral para
combatir el tráfico de drogas, armas y dinero en efectivo que nutren
la violencia en la frontera, y además complementa las otras
iniciativas emprendidas por el Gobierno de Washington contra el
narcotráfico y el crimen organizado, dijo Napolitano.
Precisó que este acuerdo se traducirá en más registros e
inspecciones de los vehículos rumbo a México; el intercambio de
inteligencia sobre actividades delictivas en la frontera y el
fortalecimiento de los protocolos para el intercambio de esos datos.
Además, el Gobierno de Estados Unidos se compromete a ayudar a
México en la capacitación de más agentes aduaneros, copiando el
modelo que se utiliza en este país para la profesionalización de sus
agentes de Aduanas, apuntó.
Carstens coincidió con Napolitano en que "el combate al crimen
organizado no debe venir a costa de la facilitación del comercio".
El intercambio comercial entre EE.UU. y México, la mayoría vía
terrestre, totalizó 367.000 millones de dólares en 2008, según la
Oficina del Representante de Comercio Exterior (USTR).
Una preocupación de los negocios en la franja fronteriza es
precisamente que el reforzamiento de las inspecciones y la
vigilancia en la zona puedan entorpecer el comercio trasnacional,
debido a las largas colas que se producen en los puntos de
controles.
Sin embargo, Napolitano minimizó esas críticas al indicar que las
inspecciones se realizarán tanto por agentes aduaneros en EE.UU.
como por sus contrapartes en México, porque se trata de una tarea
"conjunta".
Durante su vista a EE.UU., Carstens también se reunirá con
representantes de las agencias calificadoras Fitch y Standard and
Poor's, y con el presidente del Banco de la Reserva Federal de Nueva
York, William C. Dudley.
Además, tiene previsto visitar a Luis Alberto Moreno, presidente
del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), y encontrarse con John
Lipsky, primer director ejecutivo adjunto del Fondo Monetario
Internacional (FMI). EFE
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