México, 25 feb (EFE).- La Organización de Naciones Unidas para la
Agricultura y la Alimentación (FAO) avala la implantación de
cultivos transgénicos en México, así como en otras naciones en
desarrollo, denunció hoy la rama de Greenpeace en el país.
"Lo único que hacen este tipo de herramientas es asegurar que la
industria obtenga el monopolio de las semillas que alimentan al
mundo", proclamó Greenpeace junto a otras organizaciones civiles.
La asociación ecologista manifestó su preocupación por la próxima
Conferencia Técnica Internacional sobre Biotecnologías Agrícolas,
que la FAO y el gobierno mexicano celebrarán "a puerta cerrada" en
el estado de Guadalajara en marzo.
Greenpeace calificó de "lamentable" que se inviertan más de
novecientos mil dólares en una conferencia "para limpiar la imagen"
de una tecnología que, según afirmó, "contamina, aumenta el uso de
plaguicidas y, a través de patentes, elimina la agricultura
tradicional".
El pasado octubre el gobierno mexicano concedió los primeros
permisos para la siembra experimental de maíz transgénico "en
terrenos aislados", una medida que cuenta con el respaldo de la
patronal agrícola.
El maíz es, desde hace siglos, el alimento básico en la dieta de
los mexicanos, especialmente entre las capas más pobres de la
población.
Más de ochenta organizaciones mexicanas y de varios países han
dirigido una carta a la FAO en la que afirman "estar consternadas"
por su apoyo a los cultivos transgénicos de maíz, "un recurso de
importancia sin precedentes para la humanidad".
Entre ellas se encuentra 'Semilla de Vida', cuya portavoz,
Adelita San Vicente, declaró a Efe que la riqueza de la agricultura
mexicana "no es compatible con los transgénicos".
"La contaminación transgénica irreversible", sostuvo San Vicente,
"supondría el fin y la muerte" de la diversidad agrícola de México,
considerado uno de los ocho centros de origen del maíz en el mundo.
El país cuenta con 59 especies y 200 variedades adaptadas de este
cereal, usado antiguamente por diversos pueblos y culturas
mesoamericanas, como los olmecas y los aztecas.
La solución a la crisis ambiental y al hambre reside, para San
Vicente, en el retorno a la agricultura campesina.
La integrante de 'Semilla de Vida' señaló a la "agricultura
industrializada controlada por las grandes empresas" como la
responsable del desequilibrio que, en su opinión, divide el mundo
entre países con obesidad y regiones con hambrunas. EFE
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