Sao Paulo, 28 jul (EFE).- La posibilidad de que Brasil denuncie a
Argentina ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) por las
restricciones a las importaciones adoptadas en los últimos meses
quedó más distante después del encuentro mantenido hoy en Sao Paulo
por representantes de los dos Gobiernos, dijeron fuentes oficiales.
El secretario brasileño de Desarrollo, Industria y Comercio
Exterior, Iván Ramalho, afirmó hoy en una conferencia de prensa que
en su "evaluación personal" está "más distante" la hipótesis de
denunciar a Argentina ante la OMC.
La Confederación Nacional de la Industria (CNI) había recomendado
al Gobierno brasileño llevar a Argentina a los tribunales por su
política proteccionista que, estima, ha afectado al 13,5 por ciento
de las exportaciones.
Ramalho compareció ante los medios junto al secretario de
Política y Gestión Comercial del Ministerio de Producción de
Argentina, Eduardo Bianchi, con quien se reunió en la sede de la
Federación de Industrias del Estado de Sao Paulo (FIESP).
"Después de estas reuniones vamos a informar a nuestros ministros
y ellos van a programar una reunión que creo que deberá acontecer a
inicios del mes de agosto", agregó Ramalho, que calificó la visita
de la delegación argentina de "un paso importante".
En el encuentro de hoy, que tenía como finalidad estudiar la
caída del 32,9 por ciento en el comercio bilateral durante el primer
semestre del año, ambas partes explicaron que la disminución de
intercambios se puede explicar por la crisis económica
internacional.
"En el caso de Argentina, quedó demostrado que hubo una caída
general de las importaciones. Cayeron las importaciones de productos
brasileños como también de productos chinos", afirmó Ramalho.
La delegación argentina argumentó que la mayor parte de la caída
de lo que su país importa de Brasil corresponde a productos que no
están directamente afectados por las medidas proteccionistas
adoptadas por el Gobierno de Cristina Fernández.
"Los principales productos de exportación de Brasil a Argentina
que han disminuido sus ventas, no están sometidos a licencias",
destacó Bianchi.
El funcionario argentino defendió la política de licencias porque
el empleo en su país no está siendo afectado por la crisis como lo
hubiera hecho sin las medidas que, aseguró, "están cubriendo, de
alguna forma, 600.000 puestos de trabajo".
"Nuestro objetivo no es Brasil, nuestro objetivo es Asia, en
particular China, y proteger el nivel de empleo en este año tan
crítico", agregó.
Por su parte, Ramalho transmitió a la delegación argentina su
preocupación por la política de licencias no automáticas "porque
alcanza a productos muy sensibles de sectores intensivos en mano de
obra, como el calzado".
Además, el Gobierno brasileño manifestó la "preocupación de los
sectores industriales brasileños" sobre "la demora en la liberación
de licencias".
Sin embargo, reconoció que en el encuentro "quedó demostrado" que
"en el mes de julio hubo una aceleración muy evidente en el proceso
de licencias".
"Tenemos que comprender la decisión del Gobierno argentino que es
soberana, de aplicar licencia no automática en determinados
productos porque en Brasil hacemos lo mismo", concluyó Ramalho.
El encuentro de hoy fue la cuarta "reunión de monitoreo del
comercio bilateral" de este año para estudiar la situación de las
exportaciones de Brasil a Argentina, que cayeron el 42,3% con
respecto a los primeros seis meses de 2008.
A su vez, las exportaciones argentinas hacia Brasil tuvieron un
retroceso del 20,1 por ciento en el mismo periodo. EFE
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