Washington, 20 dic (EFE).- La Cámara de Representantes de EE.UU. rechazó hoy una medida aprobada por el Senado que prorroga dos meses los recortes de impuestos a la nómina para unos 160 millones de estadounidenses y que vencen a finales de este mes.
Tal como estaba previsto, y en desafío a los llamamientos de la Casa Blanca, la Cámara de Representantes, bajo control republicano, rechazó la extensión de dos meses a los recortes de impuestos a la nómina que el Senado aprobó el sábado pasado.
La moción de rechazo fue aprobada por 229 votos contra 193, y sólo siete republicanos votaron en contra.
El presidente de la Cámara baja, el republicano John Boehner, reiteró hoy la exigencia de su partido de reabrir las negociaciones para prorrogar los recortes un año, algo que ya aprobó este órgano legislativo la semana pasada en un proyecto de ley paralelo.
Boehner considera que la extensión de dos meses es insuficiente y crea "incertidumbre" en unos momentos en que el sector privado necesita alicientes para crear empleos.
La votación en la Cámara baja, de hecho, estaba inicialmente prevista para la noche del lunes, pero fue postergada para hoy en medio de las pugnas partidistas.
El Senado, bajo control demócrata, aprobó la extensión de dos meses de los recortes de impuestos a la nómina y los subsidios de desempleo como un parche de emergencia para darse más tiempo a negociar una prórroga de un año cuando reanude la sesión legislativa en enero próximo.
El líder de la mayoría demócrata en el Senado, Harry Reid, ha dejado en claro que no reabrirá las negociaciones porque el proyecto de ley en la Cámara alta recibió el visto bueno de los dos partidos y fue aprobada el sábado por 89-10, incluido el "sí" de 39 senadores republicanos.
Si el Congreso no se pone de acuerdo antes del próximo 31 de diciembre, unos 160 millones de estadounidenses, incluyendo 25 millones de hispanos, verán un aumento de impuestos a la nómina en 2012, con una subida promedio de al menos mil dólares.
Además, cerca de dos millones de personas podrían perder sus subsidios de desempleo.
La Casa Blanca y sus aliados demócratas en el Congreso han advertido del impacto económico negativo que tendría el aumento de impuestos.
Según la Casa Blanca, un aumento de impuestos afectará a 1,2 millones de estadounidenses en Puerto Rico, 16,7 millones en California, 11,4 millones en Texas, 2,9 millones en Arizona y 9 millones en Florida.
El Congreso, que ya afronta bajos niveles de aprobación popular, sería el más perjudicado por las pugnas en torno a la medida, pues la mayoría de los estadounidenses se resiste a una subida de los impuestos.
"Si no se ponen de acuerdo, verán que su nivel de popularidad seguirá cayendo, y eso tendrá consecuencias" de cara a los comicios generales de 2012, dijo el analista político Larry Sabato en declaraciones a la cadena televisiva CNN.
Esto afectará "de manera desproporcionada" a los republicanos, quienes tendrán que pagar un precio político por rechazar la medida, dijo Sabato, director del Centro para Asuntos Políticos de la Universidad de Virginia. EFE