Bruselas, 28 oct (EFE).- La Comisión Europea (CE) ha pedido hoy
una acción coordinada para sacar el máximo partido al "dividendo
digital" -el espectro radioeléctrico que se liberará con el paso del
sistema analógico al digital- porque un buen uso de este podría
equivaler a inyectar 50.000 millones de euros en la economía.
Con este objetivo, el ejecutivo comunitario ha adoptado hoy un
plan que además promoverá la inversión y la competencia en los
potenciales y nuevos servicios que puedan surgir gracias al
excedente de frecuencias.
El portavoz comunitario de Telecomunicaciones, Martin Selmayr, ha
recalcado que los beneficios obtenidos si se maximiza el reparto del
espectro sobrante podrían oscilar entre 20.000 y 50.000 millones de
euros en los próximos quince años.
Para lograr esta coordinación europea, Bruselas ha instado a los
Estados miembros a que aceleren el apagón analógico, de manera que
para el 1 de enero de 2012 el sistema digital esté completamente
instaurado en los Veintisiete.
Este proceso liberará el 80% de las frecuencias, que podrán
emplearse para impulsar Internet sin cables, teléfonos móviles más
avanzados o canales televisivos interactivos y de alta definición.
"El dividendo digital es una oportunidad única para extender a
toda Europa la banda ancha e impulsar algunos de los sectores más
innovadores de nuestra economía", ha recalcado la comisaria europea
de Sociedad de la Información, Viviane Reding.
En el plan adoptado hoy, la Comisión propone además una serie de
criterios técnicos para utilizar una frecuencia concreta (el 790-862
MHz), en la que aquellos estados que lo deseen puedan suministrar a
partir de 2010 nuevos servicios sin cable, como los teléfonos de
tercera y cuarta generación.
Gracias a la armonización de las condiciones técnicas, se evitará
además la fragmentación del mercado único.
Bruselas también ha propuesto el establecimiento, junto con el
Parlamento y el Consejo de la UE, de "objetivos estratégicos" que
cimenten una posición común europea en las negociaciones
internacionales sobre el reparto del espectro con los países
vecinos.
Aunque Selmayr ha precisado que el uso de las nuevas frecuencias
será una responsabilidad de cada Estado miembro, el portavoz ha
subrayado que el dividendo digital supondrá una "oportunidad única"
para incrementar la competitividad y la cohesión social en Europa.
EFE