Asunción, 23 jul (EFE).- El respaldo a la mediación del
presidente costarricense, Óscar Arias, en el conflicto en Honduras
impidió que el Consejo del Mercado Común (CMC) del Mercosur hoy
elaborara una declaración de consenso, en que la mostraban su
respaldo al presidente derrocado Manuel Zelaya.
En el debate sobre el documento que sería sometido mañana, la
coordinadora de Venezuela en el grupo, Isabel Delgado, pidió a los
presidentes del Mercosur y países asociados retirar de la
declaración la referencia al apoyo a la mediación de Arias.
"El diálogo terminó, el proceso de mediación terminó", señaló la
funcionaria, quien aseguró: "Tenemos instrucciones precisas de
comunicarles a ustedes que el presidente de Honduras ha terminado el
diálogo y se dirige a su país a hacer ejercicio del poder
encomendado por el pueblo de Honduras".
Agregó que el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, y el
canciller venezolano, Nicolás Maduro, acompañan a Zelaya en su viaje
hasta la frontera.
El CMC decidió postergar hasta mañana la elaboración del
documento, para tener noticias más precisas, aunque los delegados de
Uruguay, Colombia y Chile insistieron en mantener el párrafo de
apoyo a la iniciativa de mediación del presidente de Costa Rica.
Este era uno de los documentos en que los países del Mercosur y
asociados, que defiende la restitución de Zelaya en el poder,
estaban de acuerdo, junto a otro en el que defienden fortalecer la
lucha conjunta contra la gripe A.
La declaración que aprobarán mañana los presidentes, leída por la
ministra de Salud de Paraguay, Esperanza Martínez, plantea definir
las vacunas, los antivirales y los equipos de diagnóstico como
"bienes públicos globales, cuyo acceso equitativo sea posible para
toda la población".
El documento también propone ampliar "la capacidad de producción
y adquisición (de los antivirales) por parte de países de la región"
y sugiere fortalecer la red de laboratorios de detección y alerta
temprana.
No obstante, en temas que afectan al avance en la integración del
mayor bloque suramericano no se llegó a consensos, como en la
ampliación progresiva para la representación proporcional del
Parlamento del Mercosur.
"Queda sentada en acta que en un tiempo máximo de 30 días se
convocará a reunión extraordinaria del Consejo del Mercado Común
para buscar un acuerdo político", anunció el canciller de Paraguay,
Héctor Lacognata.
El canciller paraguayo reconoció que "a lo largo de la última
década, y con mayor intensidad desde la crisis de 2002, el Mercosur
no sólo no ha avanzado en cuestiones claves del proceso de
integración, sino que ha experimentado severas reversiones en el
marco económico-comercial".
Así, no se lograron avances en cuestiones como un código aduanero
común, la eliminación del doble cobro del arancel externo y la
distribución de la renta aduanera.
Además, los dos socios menores se quejaron de las "medidas
proteccionistas individuales sin coordinación regional" adoptadas
por Argentina y Brasil en respuesta a la crisis global y que, según
Lacognata, empujaron a un "aumento del descrédito del Mercosur,
especialmente ante los actores económicos del bloque".
La respuesta más dura a este rosario de quejas la dio el
secretario de Relaciones Económicas Internacionales de Argentina,
Alfredo Chiaradía, quien señaló que poner "énfasis en las acciones
de los vecinos" y no en las que se toman en los países centrales
ante la crisis "contribuye a alentar las críticas descarnadas hacia
el proceso de integración". EFE
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