Roma, 11 jun (EFE).- El impacto de la crisis económica sobre los
países en vías de desarrollo es el principal tema de debate que se
abordará en los dos días de reuniones del próximo G8 de Desarrollo,
que comenzó hoy en Roma y en el que están invitados, entre otros,
Brasil y México.
Además de los dos países latinoamericanos, han sido invitados los
otros tres componentes del llamado G5 de potencias emergentes
(China, India y Suráfrica), así como Egipto, la Unión Africana (UA)
y la Nueva Asociación para el Desarrollo de África (NEPAD).
Las cuestiones que afectan a África son precisamente otro de los
principales asuntos de la cumbre, que se celebra en el Ministerio de
Asuntos Exteriores de Italia, actual presidente de turno del G8
(Estados Unidos, Reino Unido, Japón, Francia, Alemania, Italia,
Canadá y Rusia).
En la cumbre se pondrán en común además las iniciativas adoptadas
por cada país en desarrollo sostenible para armonizar y optimizar
los recursos empleados en educación, medioambiente, sanidad,
alimentación y seguridad.
"El encuentro llega en un momento particularmente difícil por el
serio impacto que la crisis económica está teniendo sobre los países
en desarrollo, haciendo peligrar los Objetivos de Desarrollo del
Milenio" de Naciones Unidas, según la declaración de intenciones de
la página web oficial de las reuniones del G8 en Italia.
En la cumbre del G20 del pasado 2 de abril, prosigue, los
participantes acordaron diversas medidas de ayuda a los países en
desarrollo, pero "aún queda mucho por hacer", sobre todo, con
respecto a los más endeudados.
La cumbre comenzó hoy y concluirá el viernes a las 12.30 hora
local (10.30 GMT) con una rueda de prensa.
"La cumbre de ministros del G8 de Desarrollo ofrece una perfecta
oportunidad para poner en común los resultados de todos los debates
sobre asuntos de desarrollo en diversos foros internacionales hasta
la fecha", explica la página web oficial de las reuniones del G8 en
Italia.
Esta cumbre marca además la línea de los temas sobre desarrollo
social que se abordarán en la próxima reunión de jefes de Estado y
de Gobierno del G8 en la ciudad italiana de L'Aquila del 8 al 10 de
julio. EFE