Bruselas, 15 jun (EFE).- La factura de la crisis en términos de
empleo siguió aumentando en Europa en los tres primeros meses de
2009, un periodo en el que casi 2 millones de personas perdieron su
trabajo en toda la UE.
En concreto, de enero a marzo se destruyeron en toda la Unión
1.916.000 empleos, de los que 1.220.000 correspondían a la zona del
euro.
Según los datos que hoy difundió Eurostat, la oficina estadística
comunitaria, el empleo cayó el 0,8% en relación al último trimestre
de 2008 tanto en el conjunto de los Veintisiete como en los países
de la moneda única, una caída muy superior a la registrada en el
trimestre anterior (del 0,3% en la UE y el 0,4% en el área del
euro).
Si se compara con el primer trimestre de 2008, el descenso es aún
más llamativo, ya que el empleo disminuyó el 1,2% en ambas áreas, la
primera tasa negativa desde el inicio de la crisis.
Según los cálculos de Eurostat, en el primer trimestre de 2009
había en la Unión Europea 223,8 millones de personas con trabajo, de
los que 146,2 millones están en el área de la moneda única.
España, con un retroceso del empleo del 3,1% en relación al
primer trimestre, fue el segundo Estado miembro de los catorce para
los que hay datos disponibles con la peor evolución, sólo superado
por Lituania, donde el ritmo de destrucción de puestos de trabajo en
los primeros meses del año alcanzó el 4,5%.
Según los datos de la última Encuesta de Población Activa (EPA),
publicada en abril, en España se destruyeron en el primer trimestre
del año 766.000 empleos, la mayor cifra en 32 años.
Así, España sería responsable del 40% del empleo destruido en la
UE entre enero y marzo, y del 62% si se toma como referencia a los
países que comparten el euro.
Los datos de Eurostat muestran que ningún Estado miembro -de los
catorce para los que hay información- logró crear empleo entre enero
y marzo, aunque en todas las grandes economías europeas la caída fue
más moderada que en España: Reino Unido (-0,5%), Francia (-0,4%),
Italia (-0,3%) y Alemania (-0,3%).
En términos interanuales, en España el empleo bajó el 6,4%, un
registro que sólo superan Estonia (-7,2%) y Letonia (-8,2%).
Las economías de los tres países bálticos, que hasta el año
pasado estaban entre las más dinámicas de la UE, se han convertido
en muy poco tiempo en las más golpeadas por la crisis económica y
financiera y han registrado un espectacular incremento del paro.
En el conjunto de la economía europea, el efecto de la
desaceleración está llegando al mercado laboral algo más tarde, pero
de manera clara y sostenida.
Según la Comisión Europea, la caída de la actividad se deja notar
en el empleo con un retraso de entre cuatro y cinco meses, por lo
que es previsible que la destrucción de puestos de trabajo continúe
en los próximos meses.
Así, aunque el retroceso en la creación de empleo comenzó a tener
lugar ya en el tercer trimestre de 2008 -cuando cayó el 0,2% en la
zona del euro y el 0,1% en la UE)-, la bajada se hizo más evidente
en los últimos meses (-0,4% y -0,3%, respectivamente) y aún más
intensa en el primero de 2009.
El Ejecutivo de la UE ya vaticinó, en sus últimas previsiones
económicas, publicadas en mayo pasado, que entre 2008 y 2010 la UE
destruirá alrededor de 8,5 millones de empleo, lo que implica que la
crisis se llevará por delante toda los puestos de trabajo creados
los dos años anteriores (6 millones) e incluso más. EFE