Bruselas, 20 nov (EFE).- España no tiene intención de utilizar el veto como amenaza en las negociaciones del acuerdo sobre el futuro presupuesto de los Veintisiete, que tendrán lugar en una cumbre de líderes europeos esta semana, dijo hoy el secretario de Estado para la Unión Europea, Íñigo Méndez de Vigo.
"Nosotros no amenazamos, no somos de amenazar sino de querer un acuerdo justo, un acuerdo equilibrado, un acuerdo sensato y en eso estamos trabajando", señaló Méndez de Vigo al término de una reunión para preparar el Consejo europeo del 22 y 23 de noviembre, donde se intentará cerrar el marco presupuestario 2014-2020.
El secretario de Estado para la UE señaló que España va "por las buenas", aunque dejó claro que lo que el país quiere es que al final "se le haga caso".
"España no se plantea los temas en términos de bloqueo o no bloqueo. Nosotros vamos a trabajar por lograr un acuerdo constructivo, porque somos constructivos y positivos. Hemos dicho que el acuerdo tiene que ser un buen acuerdo para España y para Europa", subrayó.
Méndez de Vigo señaló que el presupuesto "es un arma política" que marca la dirección a la que quiere ir la UE y reiteró que España "no está a favor" de las reducciones propuestas por el presidente del Consejo, Herman Van Rompuy, especialmente en los epígrafes de fondos estructurales y de agricultura.
"No estamos a favor de reducir el presupuesto de la UE. Entendemos que hay otros que sí lo están, pero para nosotros el presupuesto de la UE ha tenido siempre un efecto multiplicador y ese es su valor añadido y más en tiempos de crisis en que tiene que haber ajustes fiscales en los Estados miembros", dijo.
Méndez de Vigo hizo hincapié, asimismo, en que España se mantiene firme en la idea de que no hay "urgencia" en lograr un acuerdo y subrayó que "es mejor un buen acuerdo, que darse prisa para lograr uno malo. Somos constructivos, estamos abiertos y vamos a trabajar en esa dirección", añadió.
Entre los avances propuestos por Van Rompuy, Méndez de Vigo destacó la "revisión a mitad de camino" del marco presupuestario para tener en cuenta la "situación cambiante" que se puede producir en siete años en los distintos países.
Para España, ha precisado, la medida no es una compensación por la reducción del presupuesto.
De cara a la reunión del jueves y viernes próximos, Méndez de Vigo reconoció que las posiciones "están aún alejadas" y que de momento no es posible "vislumbrar un acuerdo final".
Para intentar acercar esas posturas Van Rompuy se comprometió a presentar una nueva propuesta el jueves en la cena de jefes de Estado o Gobierno, señaló. EFE