Madrid, 29 jun (EFE).- El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, tiene prevista para septiembre una cargada agenda internacional que le llevará a Rusia, Argentina, China, EEUU, Kazajistán y Japón para asistir a diversos foros multilaterales y realizar varias visitas oficiales con marcado carácter económico.
Septiembre se convertirá así en uno de los meses más repletos de citas internacionales de Rajoy desde que llegó a la Presidencia del Gobierno.
Fuentes del Ejecutivo han informado a Efe de que la agenda exacta aún puede sufrir alguna variación, pero ya hay fechas muy aproximadas para cada uno de los viajes.
El primer destino será la ciudad rusa de San Petersburgo, donde participará los días 5 y 6 de septiembre en la cumbre del G20 junto al resto de líderes integrantes de este grupo de países desarrollados y emergentes.
Una reunión ante la que su anfitrión, el presidente ruso, Vladimir Putin, ha expresado su deseo de que se impulsen las medidas necesarias para el crecimiento económico mundial y la creación de puestos de trabajo, y que, entre los asistentes, contará con la presencia del presidente de Estados Unidos, Barack Obama.
Desde San Petersburgo, Rajoy viajará a Buenos Aires para estar presente el día 7 en la sesión en la que el Comité Olímpico Internacional (COI) decidirá la ciudad que organizará los Juegos Olímpicos de 2020.
Será un largo trayecto para llegar en la madrugada de ese día a la capital argentina, apenas unas horas antes del comienzo de la cita decisiva para las aspiraciones de Madrid en su carrera olímpica frente a Tokio y Estambul.
Rajoy prolongará su estancia en Buenos Aires un día más, y su agenda en esa jornada, aún pendiente de concretar, incluirá previsiblemente una reunión con empresarios.
No se descarta un encuentro con la presidenta argentina, Cristina Fernández, aunque Rajoy podría haber hablado ya con ella en San Petersburgo aprovechando la presencia de ambos en la cumbre del G20.
Desde Buenos Aires, Rajoy regresará a Madrid, donde apenas permanecerá dos días, porque la previsión es que el 11 inicie una visita oficial a China que se venía fraguando desde hace meses.
Su presencia en China (hasta el día 14) tendrá un marcado carácter económico y, de hecho, iniciará ese viaje en Dalian participando en el séptimo Foro Económico Mundial que se convoca en esta ciudad, una cita conocida como "el Davos de verano".
El Gobierno concede una trascendental relevancia a las relaciones económicas con Asia en general y con China en particular, y Rajoy pretende trasladarlo así a sus nuevos dirigentes, el presidente, Xi Jinping, y el primer ministro, Li Keqiang.
Tendrá también, entre otros actos, un encuentro con empresarios y con la colectividad española residente en Pekín.
Esta semana, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha viajado a China y ha puesto el acento en promover las fortalezas de la economía española y destacar el valor añadido que España puede ofrecer al gigante asiático en áreas como América Latina.
La siguiente parada en el periplo de Rajoy será Nueva York, para participar en la apertura de la reunión anual de la Asamblea General de la ONU.
Las fuentes del Gobierno consultadas por Efe han precisado que aún no está cerrada la presencia en ella del jefe del Ejecutivo, aunque las aspiraciones de España a formar parte del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas hacen previsible que acuda a la misma los días 25 y 26 de septiembre.
Allí se vería por segunda vez en unos días con Obama, con el que aún tiene pendiente cerrar la entrevista en la Casa Blanca después de la invitación que le hizo meses atrás.
Rajoy regresará a Madrid y se subirá de nuevo al avión para viajar (previsiblemente entre el 29 de septiembre y el 2 de octubre) a Kazajistán y Japón.
El ministro de Defensa, Pedro Morenés, y la titular de Fomento, Ana Pastor, se han desplazado en junio al primero de esos países, con el que España tiene muy buenas relaciones.
Kazajistán ha anunciado que comprará dos aviones de transporte militar a España, y el Gobierno considera que el programa de infraestructuras que tiene en marcha este país supone una oportunidad ante proyectos como el tren de alta velocidad entre Astaná y Almaty.
Las cuestiones económicas estarán igualmente muy presentes en el viaje del jefe del Ejecutivo a Japón, que se enmarca en la celebración del Año de España en este país.
A expensas de algún desplazamiento sobrevenido, tras su regreso de Tokio Rajoy no se trasladará de nuevo al extranjero hasta dos semanas después, cuando acudirá a Panamá para asistir los días 18 y 19 de octubre a la cumbre iberoamericana. EFE