San José, 23 jun (EFE).- El Gobierno de Costa Rica tiene como una de sus principales metas fiscales eliminar el déficit primario al final del año 2016, para lo cual reforzará las acciones de recaudación y de contención del gasto, informó hoy una fuente oficial.
El vicepresidente y ministro de Hacienda, Helio Fallas, declaró en una conferencia de prensa que con una serie de acciones administrativas se espera que en el 2016 se haya reducido a cero el déficit primario (que es el que excluye el pago de intereses de la deuda), que en 2013 fue del 2,8 % del producto interno bruto (PIB).
Según Fallas, este déficit es el más preocupante porque es el que causa que la deuda pública crezca cada año.
Datos presentados por el funcionario indican que entre el 2009 y el 2013 la deuda de Costa Rica pasó de un 42 % del PIB a un 54 %.
Entre las acciones anunciadas por Fallas, se encuentra alcanzar un crecimiento anual de los ingresos de un 14 % mediante un fortalecimiento de la fiscalización de los grandes contribuyentes para evitar la evasión, un análisis de la conveniencia de las exoneraciones fiscales existentes y la implementación del procedimiento de factura electrónica.
Además, Fallas aseguró que se pretende modernizar los sistemas tecnológicos y establecer acciones para el cobro efectivo del impuesto de la renta, el de la venta y el de aduanas.
Fallas también explicó que el Gobierno prepara una directriz que pretende reducir en un 20 % los gastos de las instituciones públicas, sin incluir salarios y pagos de intereses.
Asimismo, se realizará una evaluación sobre el pago de alquileres de edificios, equipos de cómputo y mobiliario para determinar de cuales se puede prescindir.
El ministro dijo que en 2014 el objetivo es que el déficit primario alcance el 1,85 % del PIB, lo que supondría una reducción en comparación con el 2,8 % del 2013.
Sobre nuevos impuestos, Fallas afirmó que el plan es transformar el impuesto de ventas en uno de valor agregado (IVA) que ampliará la base de productos gravados y que, posiblemente, habrá alguna variación en el impuesto de la renta.
Estos cambios se introducirían entre el 2015 y el 2016.
El año pasado Costa Rica cerró con un déficit fiscal total (que incluye el pago de intereses sobre la deuda) del 5,4 % del PIB.
Hasta mayo del 2014, ese déficit acumulado se ubica en un 2,2 % del PIB, casi igual al 2,1 % registrado en el mismo periodo del año pasado.