Brasilia, 15 mar (EFE).- El Gobierno de Brasil anunció hoy el
inicio de consultas para definir qué represalias aplica a Estados
Unidos en el área de servicios, incluyendo la quiebra de patentes
médicas y el impago de derechos de autor, por su contencioso por el
algodón en el seno de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Brasil pretende sancionar a EE.UU. en 238 millones de dólares
anuales con medidas que podrían pasar por la subida de aranceles o
hasta el impago de los derechos de autor de productos intelectuales
y la quiebra de patentes de medicamentos y productos químicos o
biotecnológicos para el sector agrícola.
Una de las opciones que se baraja es decretar la prohibición de
importar medicamentos y otros productos protegidos por patentes
durante un tiempo determinado, según la lista de medidas propuesta
para consulta publicada hoy en el Diario Oficial de la Unión.
También se plantea la suspensión del pago de los derechos de
autor y de propiedad intelectual en las áreas de música, libros y
obras audiovisuales.
El Gobierno brasileño admitirá sugerencias de las patronales que
representan a los sectores interesados en un plazo de 20 días antes
de elaborar la lista de sanciones definitiva.
Estas represalias se sumarán a otras aprobadas la semana pasada
que contemplan la subida de los aranceles a productos industriales
estadounidenses por 591 millones de dólares anuales.
La OMC autorizó a Brasil a aplicar sanciones por 829 millones de
dólares al año en respuesta al rechazo del país norteamericano a
eliminar sus subsidios al algodón, lo que perjudicó durante años a
los exportadores brasileños.
Al anunciar la apertura de consultas, el Ejecutivo reiteró hoy en
un comunicado su disposición de dialogar con las autoridades
estadounidenses para alcanzar una "solución mutuamente
satisfactoria".
También incidió en que la toma de represalias tiene como único
objetivo el respeto de las reglas comerciales internacionales y la
"salvaguardia de la credibilidad y legitimidad" del sistema de
solución de controversias de la OMC.
Los gobiernos de ambos países han manifestado su deseo de
alcanzar una solución negociada al contencioso, sin tener que llegar
a la aplicación de sanciones.
Las represalias comerciales fueron uno de los asuntos discutidos
en la visita a Brasil hecha hace dos semanas por la secretaria de
Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton, quien también dijo
confiar en una solución negociada. EFE