Palma, 18 abr (EFE).- Unas 35.000 personas, principalmente
turistas extranjeros, se han visto atrapados hoy en los aeropuertos
de Palma y Menorca, y no podrán viajar tras el cierre de ambos por
la nube de ceniza volcánica islandesa.
En una rueda de prensa de carácter urgente, el conseller balear
de Medio Ambiente y Movilidad, Gabriel Vicens, ha pedido a los
ciudadanos que no acudan al aeropuerto de Son Sant Joan para evitar
esperas y colapsos innecesarios, y que se informen de la situación a
través del servicio de emergencias 112 o su página web.
Unos 30.000 turistas están siendo atendidos por sus
touroperadores en el aeropuerto de Son Sant Joan para volver a
alojarles en establecimientos turísticos, mientras que el Govern
balear negocia con las compañías marítimas para tratar de aumentar
las frecuencias de los buques entre las Islas Baleares y la
Península. EFE
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