Tegucigalpa, 8 ago (EFE).- La economía hondureña ha sufrido
pérdidas por unos 36,8 millones de dólares diarios por las marchas
callejeras y los bloqueos de carreteras del movimiento que apoya al
depuesto presidente Manuel Zelaya, estimó la nueva ministra de
Finanzas, Gabriela Núñez, en declaraciones publicadas hoy por la
prensa local.
Estas pérdidas se suman al deterioro que ya sufría la economía
por la crisis internacional, dijo Núñez.
"Las estimaciones preliminares", expresó, "indican que Honduras
puede perder diariamente cerca de 700 millones de lempiras (unos
36,8 millones de dólares) solo por el atraso o la pérdida de
confianza en el movimiento de los productos y servicios" por las
protestas.
"La economía ya venía resintiendo los efectos de la crisis
financiera internacional", por lo que el Índice Mensual de Actividad
Económica, calculado por el Banco Central de Honduras (BCH), en los
meses previos a junio ya venía reflejando una contracción, según la
ministra.
Núñez subrayó que "ese efecto se sigue prolongando por la crisis
internacional, pero, aunado a una paralización del movimiento de
productos o de las personas que tienen que prestar un servicio o
hacer un trabajo (...), también hace que se vea un efecto de
disminución en la actividad económica".
El BCH anunció ayer que el Producto Interno Bruto (PIB) se
contraerá entre el 1% y el 2% este año como consecuencia de la
crisis internacional y del conflicto político interno causado por el
derrocamiento de Zelaya el pasado 28 de junio.
La meta inicial, fijada en marzo por el Gobierno de Zelaya, era
de un crecimiento del PIB del 2% al 3%.
Por su parte, la Cámara de Comercio e Industrias de Tegucigalpa
calcula que las pérdidas sufridas hasta hace una semana por la
economía de esta capital alcanzaron unos 3.500 millones de lempiras
(184,2 millones de dólares) en el comercio, la industria, el turismo
y por daños materiales ocasionados por el vandalismo de los
manifestantes.
Las marchas de los seguidores de Zelaya han sido diarias en
Tegucigalpa, mientras que los bloqueos temporales de carreteras en
otras zonas del país también fueron constantes, pero según la
Policía ya han cesado.
Tras el derrocamiento de Zelaya, el Parlamento designó como nuevo
presidente a Roberto Micheletti, cuyo Gobierno no es reconocido por
la comunidad internacional. EFE