Fráncfort (Alemania), 3 jun (EFE).- El consejero delegado del
consorcio austríaco-canadiense Magna, Siegfried Wolf, afirmó hoy
ante la plantilla de Opel en Rüsselsheim que espera poder firmar el
acuerdo de adquisición de Opel en cuatro o cinco semanas.
"Hay algunos puntos aún por aclarar", dijo Wolf ante los 10.000
trabajadores que hoy se congregaron en asamblea extraordinaria para
escuchar de primera mano los planes de futuro de Magna.
El ejecutivo sostuvo que las conversaciones transcurren por el
buen camino y que la transacción prevista concluirá en septiembre.
La precisión de Wolf tuvo un efecto de bálsamo en los
trabajadores después de que Magna informara, a través de un
comunicado el martes, que "los acuerdos de principio alcanzados
deberán traducirse en realidad" y que "no puedo garantizar que la
transacción, al final, se concretará".
Magna entrará en Opel con el apoyo del banco ruso Sberbank y el
fabricante ruso GAZ, según acordaron las partes interesadas en este
proceso y en consultas con gobierno alemán.
Alemania apoyará financieramente al inversor con 1.500 millones
de euros en avales en el primer semestre, monto al que seguirán
hasta 4.500 millones de euros en los próximos años.
Según publicó hoy el diario austríaco "Der Standard", Magna
también prevé solicitar ayudas públicas a las autoridades de Viena
por un monto de 300 millones de euros.
Wolf afirmó que el proceso de reestructuración que Opel pondrá en
marcha una vez atados todos los cabos pendientes estará dirigido por
el presidente de General Motors Europa, Carl Forster.
Se desconoce sin embargo si Forster, que hoy se entrevistará en
Rüsselsheim con el ministro español de Industria, Miguel Sebastián,
se mantendrá a la cabeza de la nueva empresa.
Sebastián transmitirá en ese encuentro el interés del Gobierno
español en la planta de la filial alemana de General Motors en la
localidad aragonesa de Figueruelas.
El presidente del comité de empresa de Opel, Klaus Franz, reiteró
ante los trabajadores que el camino al saneamiento de la empresa
"será duro" y tendrá efectos en la plantilla.
Franz aventuró que esos efectos harán especial mella en las
plantas de Luton (Reino Unido), Amberes (Bélgica) y Bochum
(Alemania).
El fundador y presidente de Magna, Frank Stronach, afirmó hoy en
Ottawa que al final del proceso de reestructuración Opel volverá a
generar beneficios en cuatro años. EFE