La Paz, 17 abr (EFE).- El Gobierno boliviano amenazó hoy con
"usar la fuerza" en un conflicto en el suroeste del país, donde
campesinos ocuparon las oficinas de la empresa minera San Cristóbal,
filial de la japonesa Sumitomo, y ocuparon la vía férrea fronteriza
con Chile.
El viceministro boliviano de Gobierno (Interior), Gustavo
Torrico, dijo a los periodistas que una comisión de la gobernación
del departamento de Potosí (suroeste) se ha desplazado hasta la zona
del conflicto para pedir que cesen en su protesta.
"Se les ha ido a decir que vamos a usar la fuerza pública, porque
no podemos permitir este tipo de atropellos, el operativo (policial)
ya está listo", señaló.
El viernes, un grupo de campesinos bolivianos ocupó e incendió
dichas oficinas, situadas cerca de la frontera con Chile, para
protestar por el incumplimiento de algunas promesas de la
Gobernación de Potosí.
La Minera San Cristóbal (MSC) indicó en un comunicado que el
incendio no produjo daños personales, aunque lamentó que los
campesinos derramaran concentrados de mineral que iban cargados en
un tren hacia Chile para su exportación, lo que "representa una
pérdida importante" para la firma.
Las demandas de los campesinos incluyen un proyecto de
electrificación, la instalación de antenas de comunicación y que la
sede de la estatal Empresa Boliviana de Recursos Evaporíticos
-asunto que actualmente está en discusión y que se propuso que
estuviera en La Paz- se encuentre en el Salar de Uyuni, en Potosí.
Los conflictos en la región se iniciaron a principios de semana,
cuando los agricultores bloquearon caminos y la línea férrea de
exportación hacia Chile para reclamar la presencia del gobernador
saliente de Potosí, el oficialista Mario Virreira.
Los manifestantes señalaron que quieren que el presidente de
Bolivia, Evo Morales, vaya a la zona para poder presentarle un
documento con doce reivindicaciones, algo a lo que el Gobierno se ha
negado por tratarse de demandas locales.
La minera San Cristóbal tiene el mayor proyecto minero en marcha
en Bolivia, cerca de la frontera con Chile, donde se explota a cielo
abierto una mina de plata, la mayor del país, plomo y zinc. EFE