Montevideo, 13 mar (EFE).- El presidente uruguayo, José Mujica,
afirmó que no recibirá a los representantes de la Asamblea Ambiental
de la ciudad argentina de Gualeguaychú, que desde 2006 bloquean el
puente internacional general San Martín en protesta por la
instalación de una planta de celulosa en Uruguay.
"Ahora soy presidente de la República. Paradójicamente cuando era
senador tenía más libertades", señaló Mujica en referencia a su
negativa de recibir a los delegados argentinos.
El presidente hizo esas declaraciones a los enviados de los
medios de prensa uruguayos que lo acompañan en la visita oficial que
realiza hoy a Bolivia para reunirse con el presidente Evo Morales.
"Hice algunas consultas con el Gobierno argentino sobre cómo lo
veía (el tema) y es una decisión que no tiene urgencia", agregó el
jefe de Estado.
"Espero que para abril esté el fallo de La Haya y ahí veremos",
señaló.
La Asamblea Ambiental de Gualeguaychú decidió el pasado día 10,
en asamblea y por mayoría, reunirse con el presidente uruguayo para
buscar una solución.
Desde hace cuatro años la asamblea decidió bloquear el puente
internacional general San Martín que une a la ciudad de Gualeguaychú
con la uruguaya de Fray Bentos, donde fue construida la planta de
celulosa de la empresa finlandesa Botnia, a orillas del río Uruguay,
límite natural entre ambos países.
La construcción supuso la mayor inversión en la historia de
Uruguay con 1.800 millones de dólares.
Las autoridades argentinas y los vecinos de Gualeguaychú rechazan
la planta con el argumento de que causará daños al medio ambiente de
la zona y el enfrentamiento derivó en un juicio frente a la Corte
Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya.
Como consecuencia de las discrepancias las relaciones entre los
Gobiernos de ambos países se tensaron, pero Mujica, que asumió el 1
de marzo, destacó su voluntad de normalizarlas.
Antes de asumir como presidente, Mujica viajó en dos ocasiones a
Buenos Aires y se entrevistó con la presidenta Cristina Fernández,
quien además participó en los actos de investidura del jefe de
Estado uruguayo, y el tema Botnia fue uno de los que estuvo en la
agenda.
En los últimos meses varias encuestas de opinión pública
realizadas en Argentina señalaron un creciente rechazo de los
argentinos al bloqueo del paso de frontera.
Según estimaciones oficiales, el corte del puente tuvo un coste
para Uruguay de 600 millones de dólares en los sectores del comercio
y el turismo. EFE