Lisboa, 28 oct (EFE).- Los sindicatos portugueses del sector del
automóvil están preocupados por las consecuencias de la crisis que
atraviesa esa industria en Portugal, evidenciada por los despidos y
el cierre de una de las fábricas de la multinacional Delphi.
El secretario general del sindicato de industrias metalúrgicas de
Portugal, José Simões, declaró hoy a EFE que la situación también es
"crítica" en las otras tres factorías lusas de ese fabricante de
componentes para automóviles.
Este sector industrial está en situación de "alerta", según los
sindicatos, tras el anuncio del despido de 500 trabajadores de
Delphi en su fábrica de Guarda, el cierre de la factoría de Ponte de
Sor, con 430 empleados, y los aparentes problemas de otras
instalaciones.
Portavoces de la empresa confirmaron a EFE el plan para los
despidos en la fábrica de Guarda -300 este año y el resto en el
primer trimestre de 2010-, pero rehusaron hacer comentarios sobre
Ponte de Sor y las otras factorías.
Según Simoes, "la fábrica de Braga se encuentra inmersa en un
cese temporal de actividades, la de Castelo Branco cuenta con muchos
trabajadores contratados a plazo y la de Seixal también está en una
situación complicada".
El sindicalista reconoció que la situación del sector del
automóvil "a nivel mundial es mala" y que "las perspectivas de
recuperación tampoco son buenas".
Pero recordó que Delphi fue una de las empresas del sector con
más peso en Portugal en cuanto a número de trabajadores, "que
llegaron a ser 7.000 en todo el país".
Delphi comunicó hace dos días a los representantes sindicales su
decisión sobre los despidos de Guarda y, ayer, en una reunión con
los sindicatos, avanzó el cierre de la factoría de Ponte do Sor para
finales de este año, según confirmó Simões.
Delphi "podría llevar a cabo más despidos o cierres en el país",
según Simões, aunque la administración de la empresa "ha comunicado
a los trabajadores su intención de seguir funcionando en Portugal".
EFE