Bruselas, 6 sep (EFE).- Los ministros de Agricultura de la Unión
Europea (UE) debatirán mañana sobre la crisis actual del mercado
lácteo y las medidas posibles para paliar las dificultades que viven
los ganaderos.
El Consejo de Ministros de Agricultura se reunirá con el objetivo
de discutir sobre la situación del sector de la leche y sobre las
posibles actuaciones para solucionar los problemas de los
productores, a causa de los bajos precios en origen y por caer el
consumo como consecuencia de la crisis financiera mundial.
Asistirá la titular española del Medio Rural y Marino, Elena
Espinosa, acompañada por la consejera del ramo de Castilla y León,
Silvia Clemente, que representa a las comunidades autónomas este
semestre en el Consejo de la UE.
La sesión del Consejo, prevista para final de mes, se ha
adelantado con carácter extraordinario con el objetivo de acelerar
los debates sobre la última propuesta que presentó la Comisión
Europea (CE) antes del verano, dado el panorama crítico de esta
ganadería.
Los Veintisiete se posicionarán sobre el proyecto que hizo
público Bruselas, que incluyó medidas leves y que confirmó que la CE
no quiere dar marcha atrás en la subida y la desaparición de las
cuotas lecheras, pese a que algunas organizaciones de ganaderos lo
reclaman.
Por ejemplo, la CE ha ofrecido adelantar a mediados de octubre el
pago de las subvenciones, apoyos a la promoción y continuar sistemas
de ayuda como la intervención (compra pública) de lácteos.
Un grupo numeroso de países, entre ellos España, opina que la CE
no ofrece las suficientes salidas para que el sector lechero salga
de esta coyuntura.
Francia y Alemania, secundados por siete países más han
presentado a la comisaria europea de Agricultura, Mariann Fischer
Boel, una carta para pedir a Bruselas que vaya más allá.
En concreto, estos países defienden incrementar las
compensaciones, así como una "organización económica" del sector
para facilitar las relaciones entre los ganaderos y la distribución.
En Madrid, el Gobierno y las comunidades autónomas han tachado de
insuficientes las ideas de Bruselas y han reclamado más medidas,
como por ejemplo una flexibilización de los precios de referencia
que desencadenan las ayudas.
Por su parte, la CE considera que la crisis está tocando fondo y
que hay señales leves de recuperación, pero no deja de reconocer que
los precios son anormalmente bajos y que la situación es grave.
Otro motivo de preocupación es el margen que hay entre la
cotización que percibe el ganadero y el precio que paga el comprador
por adquirir su leche.
Según datos de la CE, mientras que el precio en origen ha caído
un 39%, el que abona el consumidor sólo se ha recortado un 2%.
Fuentes de la presidencia sueca de turno de la UE han apuntado
que existe unanimidad a la hora de considerar que hay una grave
crisis, pero es previsible que mañana quede patente la división
entre los 27 sobre las soluciones.
Por otro lado, los ministros hablarán sobre la competitividad en
el sector agroalimentario y la mejora de las relaciones entre
productores y distribución, así como sobre la situación del sector
de los piensos y las negociaciones de la Organización Mundial del
Comercio. EFE