París, 8 jun (EFE).- El Gobierno francés revisó hoy a la baja las
perspectivas económicas que había mantenido desde marzo y,
alineándose con las cifras de los principales estudios de coyuntura,
reconoció que el Producto Interior Bruto (PIB) retrocederá un 3 por
ciento este año, y sólo recuperará un 0,5 por ciento en 2010.
El Ministerio de Economía adelantó estos datos, que integran la
constatación de que la recesión en el primer trimestre fue mucho más
severa de lo esperado, y serán presentados por la titular del
departamento, Christine Lagarde, en la reunión que celebrará con sus
homólogos de la zona del euro en Luxemburgo.
Fuentes del Ministerio insistieron en que después de ese primer
trimestre en que el PIB disminuyó un 1,2%, "la fase de ajuste brutal
da paso a un periodo de estabilización" que permitirá una evolución
positiva en 2010 por efecto de las políticas puestas en marcha por
el Gobierno.
Para este año, el departamento de Economía atribuye sobre todo el
descalabro económico al hundimiento de la inversión de las empresas
(-9,4%) unido al recorte del comercio exterior (-0,4%), con una
balanza exterior negativa de 42.000 millones de euros.
El consumo de los particulares se mantendrá ligeramente al alza
(+0,4%), con lo que su aportación será positiva.
El Ministerio también ha asumido que "el deterioro del empleo
debería continuar todavía algunos trimestres" y ha dado por buenos
los cálculos de las oficinas del desempleo, que han avanzado que
este año habrá 591.000 desempleados más.
El Banco de Francia ha calculado que en el segundo trimestre la
economía francesa caerá el 0,6%, lo que si se verifica -las cifras
definitivas todavía tardarán unas semanas- confirmaría una
ralentización del ritmo de baja.
En las últimas estimaciones oficiales en marzo, el Ejecutivo
calculaba que la actividad en Francia bajaría un 1,5% en 2009 antes
de avanzar un 1% el próximo ejercicio.
Las nuevas perspectivas del Gobierno están en línea con las
ofrecidas por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo
Económico (OCDE), que a finales de marzo ya advertía de que el PIB
de Francia retrocedería en 2009 un 3,3%.
La OCDE, que presentará un nuevo informe de perspectivas a
finales de mes, sostenía entonces que la economía francesa
continuaría por una senda descendente el año próximo, aunque la
caída se limitaría durante ese ejercicio al 0,1%. EFE