Washington, 14 ago (EFE).- El Gobierno de Estados Unidos informa
hoy sobre la inflación y la producción industrial durante julio, y
la mayoría de los analistas ha calculado muy poco aumento tanto de
los precios al consumo como de la actividad de fábricas, minas y
empresas de servicios.
El Departamento de Trabajo informará a las 12.30 GMT sobre el
Índice de Precios de Consumo (IPC), que en junio subió un 0,7 por
ciento, lo cual representó una aceleración después de un aumento del
0,1 por ciento en mayo, un mes cuando los precios de la energía
subieron un 7,4 por ciento.
Excluidos los precios de alimentos y combustibles, que son los
más volátiles, la inflación subyacente en junio fue del 0,2 por
ciento.
Los cálculos de los analistas para el IPC de julio van desde una
disminución del 0,2 por ciento a un aumento del 0,3 por ciento, y el
consenso está entre 0,1 por ciento de aumento y un IPC sin cambios.
Uno de los factores que podría haber contribuido a una baja
inflación en julio es el programa del gobierno del presidente Barack
Obama que ha subsidiado el canje de vehículos automotores viejos por
unidades más nuevas y más eficientes en el uso de combustible.
Los concesionarios, apurados por deshacerse del inventario de
2009, acompañaron el subsidio gubernamental con rebajas sustanciales
de sus precios, de modo que si bien aumentaron las ventas, no
aumentó mucho el valor de esas ventas.
La Reserva Federal divulgará a las 13.15 GMT su informe sobre la
producción industrial en junio.
En junio la producción de las fábricas, minas y plantas de
servicios públicos había bajado un 0,4 por ciento, y la tasa de
utilización de la capacidad industrial había bajado al nivel, sin
precedentes, del 68 por ciento.
En mayo la producción industrial había bajado un 1,2 por ciento,
arrastrada por una disminución del 1,1 por ciento en la producción
de las fábricas, que es el componente más importante de este sector.
Los cálculos de los analistas sobre la producción industrial en
julio van desde una disminución del 0,3 por ciento hasta un aumento
del 1,5 por ciento, y el consenso oscila entre un aumento del 0,6 y
uno del 0,7 por ciento.
En cuanto a la utilización de la capacidad industrial, la mayoría
de los analistas calcula que subió al 68,5 por ciento. EFE