Berlín, 20 jul (EFE).- El gobierno alemán está estudiando la
posibilidad de forzar a los bancos a acogerse a las ayudas estatales
ante el peligro de que el flujo crediticio quede completamente
paralizado en otoño.
Según informa hoy el diario "Süddeutsche Zeitung", este modelo
implicaría una participación estatal a cambio de las inyecciones
forzosas.
Hasta ahora, tanto la canciller, Angela Merkel, como su ministro
de Finanzas, Peer Steinbrück, han rechazado categóricamente esta
opción, aplicada en Estados Unidos y el Reino Unido, y han apostado
por un modelo voluntario.
El problema es que hasta ahora son muy pocos los bancos que se
han acogido al modelo voluntario, básicamente el Commerzbank y el
Hypo Real Estate, y el Gobierno teme que, de no cambiar radicalmente
la situación, las empresas alemanas se queden en otoño sin los
créditos que necesitan para mantener en vida sus negocios.
La falta de movimiento crediticio se debe, entre otros motivos, a
que muchos bancos tienen todavía muchos papeles tóxicos en sus
balances.
A ello se suma que muchas empresas tienen problemas para devolver
los créditos.
La retención crediticia es además consecuencia del cambio de las
reglas internacionales para la contabilidad bancaria, que obliga a
los institutos a tener más capital propio antes de conceder
créditos.
La canciller anunció ayer en una entrevista con la primera cadena
de televisión "ARD" que si las medidas tomadas hasta ahora por el
Gobierno no surten efecto, invitará nuevamente a las cúpulas
bancarias a la Cancillería para buscar otro tipo de soluciones. EFE