Bruselas, 3 jun (EFE).- La Unión Europea (UE) continúa las
negociaciones y los contactos para resolver el largo enfrentamiento
que mantiene con los países de Latinoamérica por el arancel europeo
a las importaciones de banano.
Los europeos siguen las discusiones en Ginebra (sede de la
Organización Mundial del Comercio, OMC) con las naciones de América
Latina y EEUU para dar una solución a este litigio, que a su vez
sirva para futuras tratativas comerciales, como la Ronda de Doha o
acuerdos bilaterales con centroamericanos o andinos.
El controvertido régimen de importación bananero de la UE
consiste en un arancel de 176 euros por tonelada aplicado a los
envíos de los grandes exportadores de Latinoamérica, que exigen una
rebaja.
En Bruselas y del lado contrario, el grupo de los ACP (África,
Caribe y Pacífico) ha criticado recientemente las ofertas de la CE a
los países de Latinoamérica para reducir dicho gravamen, pues sus
exportaciones de plátanos al mercado europeo tienen un trato
ventajoso y no se ven gravadas por los 176 euros.
Según fuentes de varios lados de la negociación, podría haber
posibilidades para un acuerdo de la UE y Latinoamérica a finales de
junio, pero quedan muchas cuestiones pendientes.
Un compromiso sobre el banano necesita el consenso de todos los
países que integran la OMC.
La última propuesta de la CE, que está sobre la mesa, consiste en
reducir el arancel de los 176 euros actuales a 136 euros en tres
años y que desde 2012 el impuesto se congele o reduzca según marchen
las negociaciones de la Ronda de Doha para liberalizar el comercio
mundial.
Vincular o no un acuerdo sobre el banano con la llamada Ronda de
Doha -que comenzó en 2001 y ahora está congelada- es uno de los
puntos de discusión y más teniendo en cuenta que no va a haber
avances inmediatos en esta última.
La comisaria europea de Agricultura, Mariann Fischer Boel,
declaró recientemente que un pacto sobre el banano debería facilitar
el avance de Doha.
Entre las opciones de la propuesta actual de la CE figuran varias
posibilidades, una de ellas una bajada máxima del arancel a 114
euros por tonelada posiblemente en 2019, independientemente de la
Ronda.
Entre los países latinoamericanos que piden reducciones del
arancel europeo hay posiciones más o menos beligerantes, con una
mayor voluntad de discusión por parte de los principales
exportadores (Ecuador es el primero), según fuentes europeas.
En los progresos de la negociación del banano también podría
tener influencia la reunión que empezará el próximo domingo en Bali
(Indonesia) del grupo de países de "Cairns" -partidario de más
liberalización de las importaciones agrícolas-, en el que están
integrados Colombia, Costa Rica, Guatemala o Brasil.
El estatus del arancel al banano determinará el grado de
concesiones adicionales que la UE hará a los países de América
Central y Andinos en las negociaciones paralelas de acuerdos
bilaterales. EFE