Brasilia, 24 jul (EFE).- Cuatro grandes siderúrgicas brasileñas
han comenzado a revisar planes de inversión que suman unos 30.000
millones de dólares, debido a la persistencia de la crisis global y
la retracción de la demanda de acero, informa hoy la prensa local.
Entre las empresas que estudian postergar por tiempo indefinido
algunos de sus planes de expansión están gigantes del sector como
Usiminas, Gerdau, la Compañía Siderúrgica Nacional (CSN) y la
Compañía Siderúrgica de Vitoria (CSV), dice el diario Valor.
Usiminas, que el año pasado había anunciado planes de inversión
por 14.100 millones de dólares hasta el 2012 en el sector de aceros
planos, estudia congelar esos proyectos y recortar esa cifra hasta
unos 4.500 millones de dólares debido a la crisis.
La empresa, que registró en el segundo semestre del año pasado
una caída de ingresos equivalente al 63 por ciento, se propone dejar
en suspenso varios proyectos planificados en el estado brasileño de
Minas Gerais, según el periódico financiero.
Similar es el caso de la CSN, que ha dejado en el congelador
proyectos de inversión por unos 12.000 millones de dólares dirigidos
a la construcción de dos plantas de producción de acero, uno en
Minas Gerais y otro en el estado de Río de Janeiro.
Valor añade que la CSV, por su parte, ha suspendido un proyecto
de inversión por 5.500 millones de dólares en sociedad con la china
Baosteel, que apuntaba a la construcción de una unidad industrial en
el estado de Espíritu Santo, con capacidad para producir unas cinco
millones de toneladas de placas de acero por año.
Gerdau, otra de las grandes siderúrgicas brasileñas, ratificó que
tiene planes de inversiones por 3.600 millones de dólares "sujetos a
la evolución de las condiciones económicas futuras".
Según expertos consultados por Valor, esas revisiones de planes
de inversión "son coherentes con el escenario de incertidumbre" que
existe en el mercado mundial del acero, que ha sufrido una fuerte
contracción de la demanda desde que estalló la crisis financiera
internacional. EFE