Madrid, 7 feb (EFE).- El Tribunal Supremo considera competencia de la Audiencia Nacional el caso que se sigue de la venta de Aerolíneas Argentinas el 2 de octubre de 2001 por parte de la SEPI a Air Comet.
En un auto al que ha tenido acceso EFE, el auto resuelve un conflicto de competencias entre el Juzgado de Instrucción de Madrid 35 y el Juzgado Central 6, e indica que la competencia del caso debe pasar a este último.
El Juzgado 35 dictó una resolución en septiembre de 2009 por la que se "inhibía" en favor de la Audiencia Nacional, por entender que los hechos que juzgaba podían ser constitutivos de un delito contra la Hacienda Pública.
La investigación iniciada por el juzgado 35 de Madrid fue traspasado al Juzgado Central 6, al que le correspondió por turno, pero este no se mostró responsable al considerar que el hecho no cumplía el requisito marcado por la ley de producir una repercusión mercantil de tal importancia que debiera ser la Audiencia Nacional la que se hiciera cargo del caso.
Por ello, el juzgado 6 remitió de nuevo la documentación al 35, y le indicó que era ese Juzgado de Instrucción el que debería llevar la investigación.
No obstante, y según lo dictado por el Tribunal Supremo, la entidad del caso debe de pasar a la Audiencia Nacional, dado que "al afectar a más de una Audiencia en el territorio, debe reconocerse la competencia de la Nacional".
En consecuencia, el auto del Tribunal Supremo concluye que la investigación debe de pasar desde el Juzgado 35 al 6 de la Audiencia Nacional para que continúe con la diligencias abiertas.
La SEPI era propietaria del 99,2 por ciento de las acciones de Interinvest, entidad mercantil domiciliada en Argentina, que poseía el 92,10 por ciento del capital de Aerolíneas Argentinas, compañía que vendió el 2 de octubre de 2001 a Air Comet por un dólar.
Asímismo, la SEPI aportó 300 millones de dólares para que Air Comet liquidase las deudas que tenía la compañía aérea, tras firmar un documento que no fue remitido al Tribunal de Cuentas para la elaboración del primer informe de fiscalización sobre la privatización de Aerolíneas Argentinas.
Según la investigación abierta, Air Comet, la empresa que se adjudicó Aerolíneas en el proceso de privatización, utilizó el dinero de la SEPI para comprar los créditos de los acreedores de la compañía aérea, lo que le permitió convertirse en el principal acreedor en el procedimiento de suspensión de pagos que se tramitaba entonces en Argentina.
De esta manera, Air Comet logró que se aprobase el convenio de acreedores de Aerolíneas con una quita (parte de la deuda que se acuerda no pagar) del 60 por ciento y un pago de sólo el 40 por ciento de las deudas.
Al alterarse los términos del contrato firmado entre el vendedor y el comprador, la investigación abierta por la fiscalía considera que Air Comet había defraudado en el ejercicio fiscal cerrado a 28 de febrero de 2002 la cantidad de 99.049,520,50 euros en el Impuesto sobre Sociedades.
La importancia de la cantidad fue lo que hizo que en su momento el Juzgado 35 remitiese a la Audiencia Nacional la investigación, que ésta rehusó, y que ahora, tras la decisión del Tribunal Supremo, debe asumir. EFE